El Papa ha recibido hoy a 50.000 chicos y chicas que han llegado a Roma en la la XIII Peregrinación de la Asociación Internacional de Monaguillos
Este martes unos 50.000 jóvenes han llegado Roma como parte de la XIII Peregrinación de la Asociación Internacional de Monaguillos, que tiene lugar del 29 de julio al 3 de agosto bajo el tema ‘Contigo’ (Is, 41,10).
Allí les esperaba el papa Francisco, quien ha reconocido que, si bien la Plaza de San Pedro “siempre es un lugar hermoso”, con estos miles de jóvenes “lo es mucho más”. Además, el Papa ha reconocido que el tema de la peregrinación le parece “hermosísimo”, ya que “ofrece un espacio para el análisis y la búsqueda de los significados posibles”.
“Contigo”, ha continuado, “es una expresión que abarca el misterio de nuestra propia vida, el misterio del amor”. “Cuando un ser humano es concebido en el vientre, la mamá le dice: ‘No temas, yo estoy contigo’. Pero misteriosamente también la madre siente que esa pequeña criatura le dice: ‘Estoy contigo’. Y esto, de modo parecido, vale también para el papá”, ha explicado.
“Pensando en ustedes, y ahora mirándolos, este ‘contigo’ se llena de nuevos significados”, ha afirmado Francisco. Y es que la experiencia de servicio en la Liturgia de estos jóvenes hace pensar al Papa “que el primer sujeto, el protagonista de este ‘contigo’ es Dios”. “Jesús dijo: ‘Donde hay dos o tres reunidos en mi Nombre, yo estoy presente en medio de ellos’ (Mt 18,20)”, ha recordado, subrayando que “esto se cumple en grado supremo en la Misa, en la Eucaristía: allí el ‘contigo’ se vuelve presencia real y concreta de Dios en el Cuerpo y la Sangre de Cristo”.
“Y en esto, queridos chicos y chicas, está el punto clave”, ha señalado. “El ‘contigo’ de Jesús, gracias a su amor, se vuelve el mío, el tuyo, el nuestro ‘contigo’ que podemos dar a los demás. Así se puede realizar su mandamiento: ‘Ámense como yo los he amado’. “Si tú, monaguillo, conservas en tu corazón y en tu carne, como María, el misterio de Dios que está contigo, entonces serás capaz de estar con los demás de una manera nueva”.
Además, el Papa ha animado a los jóvenes a decirle al prójimo “yo estoy contigo, no con palabras, sino con las obras, con los gestos, con el corazón, con la cercanía concreta: llorar con los que lloran, alegrarse con los que se alegran, sin juicios ni prejuicios, sin cerrazones, sin exclusiones”. “También contigo, que no me resultas simpático; contigo, que eres diferente a mí; contigo, que eres extranjero; contigo, aunque sienta que no me comprendes; contigo, que nunca vas a la Iglesia; contigo, que dices que no crees en Dios”, ha añadido.