Francisco se va al circo a visitar a la monja de la pastoral trans

El papa Francisco ha visitado este miércoles por sorpresa la comunidad de feriantes y artistas de circo del Luna Park de Ostia Lido. En ella reside, desde hace más de 50 años, la religiosa argentina Geneviève Jeanningros, hermanita de Jesús, que lleva adelante una destacable labor social allí.

• WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
• PODCAST: El alto precio de olvidar a los ancianos
• Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos

De hecho, la monja vive con otra religiosa en una caravana entre los feriantes, practicando una pastoral que acoge el legado de Charles de Foucauld de “ir donde la Iglesia lucha por ir”. Ella, la “enfant terrible”, como la llamó cariñosamente el Papa, acude cada miércoles a la audiencia general y lleva consigo desde hace años grupos de nómadas, artistas de circo y personas LGTBIQ+.

Según ha informado la oficina de prensa del Vaticano, Francisco “salió del Vaticano y llegó a Ostia a las 15:00 horas para visitar a la comunidad de feriantes y artistas de circo del Luna Park de Ostia Lido”. Allí, el Papa “bendijo una estatua de Nuestra Señora protectora del espectáculo ambulante y del circo y saludó a las familias y a los niños presentes”.

“Adelante con alegría”

“¡Pero qué alegría tan grande nos da!”, comenzó la monja, abrazando al Pontífice. Tal como recoge Vatican News, sor Genevieve acompañó al Papa a la parroquia de Regina Pacis, donde hay una sala utilizada para las fiestas de cumpleaños de los niños y donde Francisco ha sido recibido por familias y feriantes de la comunidad.

“Les agradezco a todos por lo que hacen para hacer sonreír a la gente”, dijo el Papa al tomar la palabra. Saludó a algunos niños que ya lo habían conocido, muy pequeños, en 2018, cuando celebró el Corpus Domini en Santa Mónica, también en Ostia.

Y bromeó cuando muchos agradecieron a sor Geneviéve su cercanía: “¿Tú también estás en el circo? ¿Trabajas con leones?”, le ha preguntado el Papa a la religiosa. “¡Las monjas nos los quieren quitar, no lo permitiremos!”, gritó un hombre entre el público. “Adelante, yo os apoyo”, dijo el Papa. “Estoy feliz”, añadió el Papa, “de ver esta alegría. Adelante, con coraje y siempre con alegría”.