Desde 2011 esta asociación ha pasado de repartir comidas a ofrecer talleres educativos y un centro social para los más vulnerables
Hace trece años la hermana Fuensanta Meléndez, religiosa del Sagrado Corazón de Jesús, puso en marcha el Comedor Social de Torrejón de Ardoz. Con forma de asociación abrió sus puertas como una respuesta evangélica a personas en situación de calle y con extrema vulnerabilidad.
La necesidad de la labor de la Asociación Comedor Solidario de Torrejón de Ardoz se manifiesta cada día ya que reparte comidas para 250 personas. Una realidad que sería difícil de atender sin la gran ayuda de la parroquia Ntra. Sra. del Rosario, perteneciente a la diócesis de Alcalá de Henares.
Para Meléndez “es muy importante dar de comer pero más importante todavía es ayudarles a rehacerse como personas, que recobren su dignidad y que recuerden siempre que toda persona es digna de que se le respete”. Con el propósito de expandir este acompañamiento, dieron un paso más y añadieron al comedor solidario una serie de talleres socioeducativos y un centro de acogida y encuentro.
Margarita Villa, directora de la asociación, cuenta que en el comedor “a todos se les conoce por sus nombres y apellidos y en la que se celebran los cumpleaños, la Navidad o el día de Reyes”. Además, Villa destaca que la ayuda que reciben del párroco y de la comunidad parroquial “es fundamental para muchas situaciones que el comedor no tiene capacidad de gestión, como buscar alimentos por toda la Comunidad de Madrid”.