La Escuela de Teología en Internet (ETI) de la Facultad San Esteban de los dominicos de la provincia de Hispania ha dado el pistoletazo de salida a su nuevo curso. Y lo ha hecho a través de un acto académico celebrado en el espacio O_Lumen que ha contado con una conferencia pronunciada por el fraile manacorí Martín Gelabert, catedrático emérito de la Facultad de Teología de Valencia. El evento, que estuvo presidido por el prior provincial y presidente de la Confer, Jesús Díaz Sariego, conto con el director del ETI, Rodrigo Hidalgo, como anfitrión.
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‘El ser humano no tiene precio, porque tiene dignidad’ fue el punto de partida que vertebró la reflexión del catedrático emérito de la Facultad de Teología de Valencia. “Este paradigma es distinto y , en ocasiones, opuesto al paradigma tecnocrático”, advirtió el pensador dominico. Para aterrizar esta premisa, se detuvo en la cuestión de la eutanasia. “Hay legislaciones que favorecen la muerte de esos enfermos costosos y nada rentables. La salud tiene un precio muy alto y el suicidio uno muy bajo”, denunció Gelabert.
Reconocimiento del otro
Así, expuso que mientras el coste de practicar la eutanasia se mueve entre 35 y 40 euros, el gasto de los cuidados paliativos de un enfermo ascienden a los 35.000 o 45.000 euros. “Todos conocemos el precio de todo, pero muchos ignoramos su valor, especialmente el de las cosas decisivas”, comentó más tarde.
Rodrigo Hidalgo, director de la Escuela de Teología en Internet
Para Martín Gelabert, “la dignidad no es algo que se adquiere, es algo que se tiene”. “Sin el reconocimiento del otro como el otro yo, lo concibo como un objeto”, apuntó. A partir de esta mirada ética, entró en la esfera teológica. “Dios es la medida de lo humano”, aseveró, desde el convencimiento de que “un atentado contra el ser humano es un atentado contra Dios”. “La vida hay que defenderla en su totalidad y en todas sus dimensiones”, destacó, remarcando la importancia de defender la vida del no nacido que de quien llega en una patera.
Misión y evangelización
“Nada que sea humano puede ser ajeno a la teología”, subrayó el director de la Escuela de Teología en Internet, que subrayó cómo el centro formativo “pretende rescatar una brillante iniciativa y el legado de ocho siglos de tradición teológica, misión y evangelización de hombres y mujeres que con su doctrina han iluminado la vida de la Iglesia a través de la orden de predicadores”.
“Los dominicos fuimos pioneros en la formación en teología y ahora hemos buscado redoblarlo en el mundo digital”, remarcó Rodrigo sobre un proyecto educativo que tiene una mirada internacional. No en vano, hoy por hoy, cuenta con más de dos centenares de alumnos “desde Estados Unidos a la Patagonia de Chile”, pero también de otros países europeos. “Se trata de una comunidad virtual, pero a la vez real, que habla de Dios”, sentenció.
