3,8 millones de hectáreas han sido devastadas por los incendios forestales en la Chiquitanía – región oriental boliviana – en el departamento de Santa Cruz, de las que el 60% son pastizales y 40% bosques. El gobierno ha declarado una “emergencia nacional”.
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Los obispos de este país han lanzado un SOS y exigieron a las autoridades “una respuesta pronta ante el daño del medio ambiente producido por la quema indiscriminada” para evitar que “esta catástrofe medioambiental y nacional vaya en aumento”.
“No sólo es el daño a la Creación sino el daño a las personas que habitan esos territorios, debido a la destrucción de su hábitat y a la contaminación del aire”, señalaron. Toda vez que han denunciado que “vivimos en Bolivia un desastre ecológico provocado por la mano humana, de consecuencias irreparables”.
Imágenes de un incendio en Roboré en la provincia de Chiquitos, Bolivia / Foto: Bombero voluntario
Políticas de prevención
Los prelados también han pedido atender la emergencia medioambiental como la crisis social para “ayudar a todas las personas que sufren a causa de esa situación”, porque “no se trata sólo de erradicar los incendios”.
También recomiendan que se tomen “políticas públicas de prevención”, puesto que no es la primera vez que sucede, de hecho, en 2019 cuando el fuego devoró 1millón de hectarias en la Chiquitanía. “Está en juego es el futuro de nuestros niños y jóvenes”, advirtieron.
Recordaron que el papa Francisco en Laudato Si’ invitó a tomar conciencia de la crisis ecológica y ha pedido especialmente a la Iglesia como “a los responsables nacionales de la toma de decisiones y a todas las personas de buena voluntad a reconocer la urgencia” de este desafío.
“Nuestra Bolivia es una sola, y la mirada de las instituciones debe de ser no sólo de igualdad, sino de preferencia por aquellas regiones del país que necesitan más ayuda, y en este momento es el oriente boliviano quienes demandan la asistencia urgente”, añadieron.
Han reafirmado el compromiso con “los hermanos del oriente boliviano y otras regiones que están sufriendo este desastre medioambiental y nacional, porque son inseparables la preocupación por la naturaleza y la justicia con los pobres”.
Foto: EFE
