El cura ha fallecido a los 83 años siendo uno de los “grandes pilares” del intérprete
El actor Miguel Ángel Muñoz ha despedido, a través de sus redes sociales, a una persona que ha sido fundamental a lo largo de su vida: el sacerdote Pepe Casanova, quien ha fallecido a los 83 años de edad y a quien Muñoz conocía desde sus 14 años.
“Mi profesor, mi cómplice, mi cura, mi gran amigo y uno de mis grandes maestros”, ha escrito el actor en una emotiva publicación de Instagram. “Has estado en todos los momentos importantes de mi vida, profesionales y personales. En las adversidades siempre he acudido a ti y siempre, sabiamente, has sabido consolarme y darme una clave para seguir adelante”, continúa.
Muñoz no escatima en elogios a su amigo: “inteligente, sabio, cercano, amable, generoso, paciente, compresivo y misericordioso. Nunca me has hecho sentir mal por nada de lo que te haya planteado”. Además, agradece “todo lo que has hecho por mí y por los míos. Especialmente por mi Tata a quien diste sepultura y previamente la unción de los enfermos, para que fuera a descansar en Paz”.
“Ayer, cuando recibí la noticia, se me partió el alma”, relata el actor. “Se me hace muy duro aceptar tu pérdida”, ya que, después de la pérdida de otro amigo y de su abuela, el sacerdote era para Muñoz “un pilar en el que me sostenía y que me ayudaba a que poquito a poco fuera cicatrizando”.
Finalmente, el actor se despide: “Me quedo en paz por haberte mostrado mi agradecimiento, admiración y amor, en privado y en público y sobretodo por haber tenido la suerte de haber podido asistir hoy a tu pueblo #FuenteElFresno en para acompañarte junto a toda tu familia y darte este último adiós, con la iglesia completamente llena de amigos en una ceremonia muy especial”. “Gracias Pepe por iluminarme el camino. Intentaré hacer todo lo posible para que sigas orgulloso de mi, ahora desde el cielo”, concluye.