El papa Francisco ha expulsado a diez personas de la que fuera la cúpula del Sodalicio, el movimiento eclesial fundado por el laico Luis Fernando Figari. De hecho, el pontífice adopta esta medida apenas un mes de echar a Figari del llamado Sodalitium Christianae Vitae. De esta manera, el Sucesor de Pedro sanciona al que fuera su superior general, a dos ex provinciales, tres ex formadores, dos ex miembros, un arzobispo y un comunicador.
Así lo ha hecho saber la Conferencia Episcopal Peruana a través de un comunicado, que explica que la decisión ha sido adoptada “tras valorar las defensas correspondientes a las denuncias que emergieron durante la ‘Misión Especia’” que el Sucesor de Pedro encargó al arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y al oficial del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, Jordi Bertomeu.
Tal y como reza la nota del Episcopado peruano, el paso al frente del Papa se produce tras la investigación realizada entre los meses de julio y agosto 2023. “Para adoptar tal decisión disciplinar se ha considerado el escándalo producido por el número y la gravedad de los abusos denunciados por las víctimas, particularmente contrarios a la vivencia equilibrada y liberadora de los consejos evangélicos en el contexto del apostolado eclesial”, recogen los obispos peruanos.
Incluso se enumeran una a una las causas que ha llevado a esta sanción ejemplar, entre los que se encuentran abuso físicos, incluso con sadismo y violencia y abuso de conciencia, con métodos sectarios para quebrar la voluntad de los subordinados. De la misma manera, se ratifica la existencia de “abuso espiritual, con instrumentalización en el fuero externo de la información obtenida en el fuero interno no sacramental o dirección espiritual”. De la misma manera, se constata abuso del cargo y de autoridad, “con episodios de hackeo de las comunicaciones y acoso en el lugar de trabajo así como encubrimiento de los delitos cometidos en el seno de esta institución”. A esto, se añade abuso en la administración de los bienes eclesiásticos y abuso en el ejercicio del apostolado del periodismo.
Por todo ello, los obispos de Perú y el Papa hacen saber a través del comunicado que se muestran “entristecidos por lo ocurrido, piden perdón a las víctimas y se unen a sus sufrimientos”. A la par, instan a esta Sociedad de Vida Apostólica a iniciar “un camino de justicia y reparación”.
El Sodalicio, fundado en Perú en 1971 para formar intelectualmente a jóvenes “como soldados de élite en el ejército de Dios”, comenzó a recibir las primeras denuncias en 2011, cuando el tribunal eclesiástico de Lima analizó cuatro denuncias contra el fundador. Sin embargo, el verdadero estallido del escándalo se produjo en 2015, cuando los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz publicaron el libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’, en el que se relataban los abusos cometidos por los miembros del Sodalicio.
De esta manera, los expulsados por el Papa del llamado Sodalitium Christianae Vitae son: