Ha culminado la novena versión de la Copa de la fe, torneo que desde 2013 reúne a sacerdotes de Colombia y otras partes del mundo para vivir la fraternidad y misión en el fútbol.
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Del 23 al 28 de septiembre, 543 sacerdotes de Colombia, Venezuela y México disputaron este torneo en Riohacha, capital de La Guajira, al norte de Colombia.
El equipo de la diócesis de Garzón – del departamento del Huila – venció al de México y se coronó como tricampeón (2016, 2023 y 2024), llevándose la copa de oro. Mientras que la copa de plata fue para la arquidiócesis de Bucaramanga y bronce para Medellín.
Los sacerdotes además de jugar salieron a misionar a las periferias de La Guajira / Foto: CEC
Llegar a las periferias
Francisco Antonio Ceballos, obispo anfitrión, hizo un balance en la clausura sobre esta iniciativa que “no solo busca motivar el deporte, sino también el acercamiento de los sacerdotes a las comunidades”.
“Una Iglesia que deja las sacristías, que sale a la calle; una Iglesia que, como dice el Papa, está en salida misionera”, apostilló el prelado.
En esta novena edición, los partidos – por primera vez desde su creación – se disputaron no solo en la capital, sino en otros municipios del departamento como Barrancas (tierra del futbolista Lucho Díaz) y Dibulla.
Ceballos ha resaltado que los sacerdotes llegaron a las periferias llevando alegrías a quienes “también necesitan vivir con intensidad estos acontecimientos: el deporte, el arte, la música, el encuentro fraterno, escuchar el Evangelio”.
Foto: Facebook Copa de la Fe Riohacha 2024
