El prelado, de 69 años, es el actual presidente de la Conferencia de obispos de Ecuador y ha sido uno de los principales mediadores entre Gobierno y sectores sociales
“No ser servido, sino servir”, fueron las primeras palabras de Luis Gerardo Cabrera, arzobispo de Guayaquil y presidente del episcopado ecuatoriano tras conocer su nombramiento como cardenal este 6 de octubre.
La noticia también lo ha cogido también de “sorpresa” en Roma, donde participa en la segunda sesión del Sínodo 2021-2024.
Señaló que las palabras del evangélico paraje de Mateo “vinieron a mi mente cuando leí la noticia de que el Papa Francisco me encomendaba un inesperado servicio en la Iglesia”.
Por supuesto, será una misión de la que “tendré que aprender poco a poco, junto con cada uno de ustedes, a la luz de la Palabra de Dios que nos hace más hermanos y amigos, como nos invita el presente sínodo”.
Acoge con “mucha paz y humildad” la encomienda, porque “sé que no es un honor ni tampoco un reconocimiento de mérito alguno, sino una expresión de cercanía y de confianza del Papa Francisco”.
Cabrera, de 69 años, nació en San Francisco de Peleusí de Azogues, cabecera cantonal de la provincia de Cañar al sur de Ecuador.
El 1.° de octubre de 1975 ingresa al noviciado de la Orden de Frailes Menores de Quito. Hace sus primeros votos religiosos el 24 de septiembre de 1976 y la profesión solemne el 4 de septiembre de 1982.
Cuenta con estudios en filosofía y teología. Se doctoró en filosofía en la Pontificia Universidad Antonianum. Fue ordenado sacerdote el 8 de septiembre de 1983.
El 20 de abril de 2009, el papa Benedicto XVI lo nombra arzobispo de Cuenca. Durante el periodo 2011- 2014 fue vicepresidente del episcopado y en 2014 asume la presidencia de la Conferencia episcopal de laicos. El 24 de septiembre de 2015, el papa Francisco lo nombra arzobispo de Guayaquil.
En 2017, repite para la vicepresidencia del Episcopado en ese periodo desempeño un papel crucial en la promoción del diálogo y la paz en el marco de las protestas sociales de 2019 hasta que el 10 de noviembre de 2020 fue elegido presidente.
El 7 de noviembre de 2023 fue reelecto para un nuevo trienio hasta 2026. Fue designado como presidente delegado por Ecuador en la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los obispos.
Foto: Conferencia episcopal ecuatoriana