‘Humilitas’ (“Humildad”). Esta palabra latina –sin escudo propio– es el lema del nuevo obispo de Sant Feliu de Llobregat, el dominico guipuzcoano de 54 años Xabier Gómez, que ha pasado parte de su vida religiosa en Barcelona y hasta ahora director del Departamento de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española.
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Diócesis integradora
“Me gustaría mucho hacer crecer la dimensión de la acogida y de la integración de los inmigrantes a la diócesis de Sant Feliu de Llobregat”, señaló en su primera intervención en el obispado catalán. Para él, “los migrantes enriquecen la sociedad y las comunidades cristianas”. “Quiero continuar con este compromiso de promover comunidades acogedoras, integradoras y misioneras al servicio de la alegría del evangelio y del evangelio de la vida. La migración nos da esta oportunidad de crecer en diversidad y catolicidad”, añadió.
Sobre su lema reclamó el que será el segundo prelado en la historia de la diócesis que “la humildad es muy necesaria”, especialmente “en un momento de polarización, autorreferencialidad y confrontación, necesitamos mucho la humildad para acercarnos, hacer puentes y mantener una cultura del diálogo y el encuentro”. Por su parte, el emérito Agustí Cortés anunció que vivirá en si casa familiar de Valencia para recibir el tratamiento para el cáncer en el Hospital de la Fe.
