Marcharon, cantaron, rezaron el rosario y se disfrazaron de su santo favorito como contrapeso a “otras celebraciones más sombrías”
“Jóvenes talentosos, haciendo lío para Jesús y María”, bajo este lema el vicariato de Sucumbíos, norte de la Amazonía ecuatoriana, organizó una marcha para conmemorar el Día de los Santos.
Iniciativa que lleva tres años consecutivos en esta jurisdicción eclesial en la que avivaron la fe y fortalecieron la misión como contrapeso a “otras celebraciones más sombrías” en la víspera del 1 de noviembre, explicó Jefferson Pinzón, coordinador de la Pastoral Juvenil del vicariato.
Es así como tomaron las calles de Lago Agrio, cantaron, rezaron el rosario y se disfrazaron de su santo favorito al mejor estilo de holywins, porque “nosotros, los jóvenes, queremos ser luz de esperanza y seguir el ejemplo de quienes nos precedieron, vestidos como nuestros santos favoritos, que fueron amigos de Jesús, al igual que nosotros hoy día”.
Grace Ortiz, participante de esta marcha, ataviada como Nuestra Señora de Guadalupe – patrona de América Latina –, siente que con esta “hermosa experiencia” fortaleció su fe y aprendió más sobre “amar a Dios y a mis amigos”.
Fueron muchas las representaciones en este holywins: Teresita de Jesús, Teresa de Calcuta, José, Carlos Acutis, Vicente de Paúl y Francisco. Además los jóvenes portaron pancartas alegóricas a la santidad, al amor a Dios, al prójimo y el cuidado de la casa común.
Para Celmo Lazzari, obispo de Sucumbíos, “esta caminata y celebración evidencian la alegría de los jóvenes al ver modelos concretos de vida en los santos y santas, en contraposición a fiestas que evidencian la oscuridad y el mal”.
El prelado insistió en el camino de la santidad para “dejarnos guiar por Dios, purificándonos de todo lo que nos aleja”. Recordó que los santos son “nuestros intercesores, quienes vivieron con Jesús y pusieron en práctica sus enseñanzas”.
“Busquen la santidad y contagien a otros con su luz”, fue la invitación de Lazzari toda vez que invitó a vivir la alegría del Evangelio “abandonando las prácticas de las tinieblas y buscando la alegría eterna que solo Dios puede ofrecer”.
Foto: Vicariato de Sucumbíos