Los carismáticos ajustarán sus prácticas a las normas de la Conferencia Episcopal sobre los ritos de “sanación”

03/12/2024 | Mateo González Alonso

La asociación privada de fieles “se adhiere a la misma con obediencia filial” a la nota doctrinal de los obispos que prohibía rituales que se practican durante sus retiros y celebraciones

Tras la condena por el “delito de pseudomisticismo” a 19 miembros del Seminario del Pueblo de Dios en la misma semana en la que la Conferencia Episcopal Española publicaba una nota doctrinal para alertar sobre rituales de sanación que están aumentando “en el ámbito de oraciones y retiros organizados por nuevos movimientos religiosos de carácter carismático”; siguen las reacciones. Ahora la Renovación Carismática Católica en España (RCCE) ha reiterado públicamente en un comunicado su adhesión.

Obediencia filial

Firmado por el coordinador nacional, Víctor Gregorio Arellano, y el asesor espiritual nacional, Francisco Javier Ramírez de Nicolás, esta asociación privada de fieles se refiere expresamente a la cuestión de la práctica de la “sanación intergeneracional”. En este sentido acogen el documento doctrinal de 1 de noviembre de 2024, de la Comisión Episcopal para la doctrina de la Fe de la Conferencia Episcopal Española cuyo título es “Su misericordia se extiende de generación en generación” (Lc 1, 50).

Para la RCCE la nota “es necesaria para aclarar conceptos, riesgos en esta práctica, así como los ámbitos de su realización, a la luz de los estudios realizados y los apuntes del Magisterio de la Iglesia Católica que enuncia y que “ayuden a detectar y corregir estas prácticas que se alejan de la Tradición y el Magisterio de la Iglesia y que pueden causar gran daño moral y espiritual al pueblo santo de Dios”. Con esta premisa, la Renovación Carismática acoge “con gratitud esta Nota, se adhiere a la misma con obediencia filial, compartiendo su contenido y la preocupación que subyace y seguirá velando para que, en el ámbito propio de nuestra asociación, parte de la entera Corriente de Gracia, se sigan sus directrices”. La propia RCCE y sus estatutos son aprobados por el episcopado.