La iniciativa de los Líderes Católicos pretende continuar consolidando la formación y el intercambio de ideas en esta sociedad laicista
Según una encuesta de Latinobarómetro de 2023, solo el 38% de la población de Uruguay se identifica como católica. En la capital uruguaya hay 83 parroquias; alrededor de 100 iglesias y capillas; y cuentan con 80 sacerdotes seculares; 100 religiosos de distintas congregaciones, y 15 sacerdotes de la prelatura Opus Dei. En este contexto viene desarrollando sus actividades la Escuela de Líderes Católicos de Montevideo.
Si bien Uruguay es uno de los países con más laicidad en América Latina, una nueva generación de líderes se prepara para transformar la sociedad y vivirla de acuerdo con la fe.
En el 2018 se abrió esta Escuela en Montevideo, una iniciativa vinculada a la Academia Internacional de Líderes Católicos. Fue la primera en el país con la finalidad de acoger un proyecto que se inició en Chile y se ha expandido por Latinoamérica y Europa, y está llegando a África.
La escuela permite formar a jóvenes comprometidos con la fe y con la construcción de una sociedad más justa, dejando una profunda huella en su quehacer.
Pablo Rodríguez, economista, director de la Vicaría para la Pastoral y actual director de la Escuela de Líderes Católicos de Montevideo, indicó que Uruguay es un país secularizado y con un fuerte sentido anticlerical. Destacó, entonces, la importancia de la formación integral que ofrece la escuela: “En cuanto a la experiencia, vino a llenar un vacío que había en cuanto a la formación de la doctrina social de la Iglesia en jóvenes en Uruguay, que siempre es algo muy pedido por los laicos, la formación, la formación, la formación. Y bueno, en este sentido, desde 2018 se ha apostado por esta formación que la verdad es bastante integral “.
Uno de los pilares fundamentales de la formación en la Escuela es el encuentro con Cristo. El director de la Escuela en Montevideo citó: “Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe” (Col 2), y afirmó: “Para estar arraigados y edificados, principalmente, hay que estar formados“. La Escuela busca que los jóvenes católicos desarrollen una fe basada en fundamentos sólidos y argumentos contundentes, con el objetivo de contribuir a la construcción de una sociedad más justa.
Sobre el impacto de la Escuela en las generaciones formadas, remarcó que los ex alumnos de la Escuela se han volcado a actividades pastorales, tanto en sus comunidades como a nivel arquidiocesano. “La Secretaría de Pastoral Social de la arquidiócesis de Montevideo está liderada por una ex alumna. Yo mismo, que ahora trabajo en la Vicaría Pastoral, puedo ver cómo muchos de los egresados están animando la vida de toda la comunidad. Ha sido un fermento importante“.
Este 2 de diciembre se celebró la graduación de la sexta generación de la Escuela. Y, en vistas al futuro, la intención es seguir consolidando la formación anual y de crear espacios para el intercambio de ideas: “Queremos crear núcleos de discusión, de pensamiento, y generar conferencias y talleres sobre temas puntuales que la Iglesia esté viviendo. Es crucial seguir trabajando en estos temas tan importantes para nuestra sociedad”.
La Escuela de Líderes Católicos de Montevideo se ha convertido en un referente clave para la formación de líderes comprometidos con la fe y la transformación social, contribuyendo al fortalecimiento de la Iglesia en un país marcado por su secularización.