Hace unas semanas, el proyecto legislativo referido a la “Ficha limpia” que implicaba que cualquier persona condenada en segunda instancia por corrupción no podría postularse como candidatos en las elecciones, no tuvo el quorum necesario para su tratamiento en la Cámara baja.
Si bien dicha iniciativa había sido presentada por los legisladores del partido del ex presidente Mauricio Macri, del partido PRO, el presidente Javier Milei, en la inauguración del período legislativo del 1ª de marzo, había prometido esta ley.
El organismo que nuclea al empresarios cristianos, la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas (ACDE) emitió un comunicado pidiendo el tratamiento y sanción de este proyecto.
Afirmaron que la política es indispensable en la vida social, y que la búsqueda del bien común de quienes dirigen la “cosa pública” en una “una forma eminente de la caridad“, una forma de entrega, un dejar de lado el egoísmo de la búsqueda de lo individual para abrazar lo colectivo.
Consideran que es indispensable que quienes gobiernan en nombre de los ciudadanos y los representan gocen de la más alta estima social. “Cualquier duda sobre la honestidad u honorabilidad de los funcionarios genera daños irreparables al sistema. Genera, en la conciencia del ciudadano, la sensación de que sectores de la dirigencia de nuestro país sólo buscan el poder o beneficio personal”, afirmaron.
Por tal motivo, los miembros de ACDE exhortaron a los diputados nacionales a que traten y sancionen el proyecto de ley “Ficha Limpia”, que viene siendo impulsado por la sociedad civil, desde hace años, como una forma de moralizar la acción política.
Cree que para la convivencia pacífica y el desarrollo económico es necesario que el país se fortalezca institucionalmente por medio de valores éticos y morales que ayuden a conducir la acción de toda la dirigencia, “conforme nos enseñara nuestro fundador el empresario argentino Enrique Shaw“.