Presentada este 9 de diciembre en la Sala Stampa, pero lanzada oficialmente para América Latina y el Caribe este 10 de diciembre –Día Internacional de los Derechos Humanos–, la Iglesia de la región cierra filas con la campaña “La vida pende de un hilo”.
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Se trata de una iniciativa que tiene el propósito de visibilizar y proteger a defensores de derechos humanos y ambientales de América Latina y el Caribe a partir de casos emblemáticos, incluyendo a líderes sociales y actores cívicos que se encuentran en riesgo por su labor profética.
Bajo el lema “Tejiendo futuros, protegiendo vidas”, varias organizaciones eclesiales y sociales, lideradas por el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), la Plataforma de Paz, Democracia y Derechos Humanos, y la Comunidad de Protección Latinoamericana, buscan que estos casos no queden en el “olvido de la impunidad”.
Casos emblemáticos
Juan López, líder hondureño vinculado a la Iglesia
En esta primera etapa han presentado el caso de Juan Antonio López, reconocido defensor del río Guapinol y del parque nacional Botaderos “Carlos Escaleras Mejías” en Honduras, integrante de la Red Eclesial Mesoamericana (Remam) de la Diócesis de Trujillo.
Aunque el líder hondureño contaba con medidas de protección dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por amenazas recibidas, el 14 de septiembre de 2024 fue asesinado por desconocidos armados, luego de que saliera de la parroquia de San Isidro Labrador.
Otro caso, el padre Marcelo Pérez, sacerdote indigena de Chiapas (México), encendió las alarmas de la Iglesia y de la comunidad internacional. Con ello, se ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de estos defensores de la casa común y sus poblaciones.
En 2023 más de 200 fueron silenciados, y en 2024 la cifra sigue aumentando. Por ello, desde la curia romana se han sumado el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral y de la Pontificia Comisión para América Latina (PCAL).
Desmantelar la indiferencia social
Para participar de este lanzamiento de modo virtual podrán hacerlo en las redes sociales del Celam a las 18 horas de Colombia. Participarán representantes de distintos sectores sociales y religiosos de América Latina.
Además se realizarán en simultáneo actos en el municipio de Tocoa (Honduras) en memoria de Juan Antonio López. Sus organizadores han señalado que durante la campaña se podrán postular otros casos.
Para ello, deben basarse en cinco ejes temáticos: modelo extractivista; narcotráfico y crimen transnacional; limitación en la libertad de expresión y la participación ciudadana; conflictos armados internos; y freno a las mujeres defensoras de derechos humanos y su rol en la política.
Así pues, se compartirán “diversas historias y rostros de mujeres y hombres comprometidos con organizaciones sociales y eclesiales defensoras de derechos humanos y pueblos indígenas, entre otros, incluyendo ambientalistas y periodistas, a fin de impulsar acciones concretas frente a la indiferencia social”.
Audacia evangélica
La campaña tendrá una duración de un año hasta el 10 de diciembre de 2025. Estos asesinatos no son “casos aislados”, sino que forman parte de un “patrón sistemático” de los que hay que alertar a toda la sociedad.
Por lo que el cardenal Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre (Brasil) y presidente del Celam, subrayó que “la vida es sagrada, no podemos ser indiferentes ante la vida amenazada de quienes defienden los derechos humanos y ambientales, los líderes sociales y los actores cívicos que se encuentran en riesgo”.
Por su parte, el cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el desarrollo humano integral, se ha puesto la camiseta y sugirió a sus pares latinoamericanos tener “audacia evangélica para desarrollar acciones solidarias con los líderes, quienes se inspiran en el magisterio del Papa”.
