La Subcomisión para la Familia y la Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal Española publica su mensaje para la fiesta de la Sagrada Familia del 29 de diciembre
Para los obispos españoles, “la familia es la comunidad que une persona y sociedad”. Así lo expresan en el mensaje con motivo de la Jornada de la Sagrada Familia, que se celebra el domingo 29 de diciembre bajo el lema ‘Familia, fuente de esperanza’.
Elaborado por la Subcomisión para la Familia y la Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal Española y publicado este lunes, el escrito apunta que “en el momento actual nos encontramos en medio de una transformación profunda que puede afectar no solo a la sociedad, sino también al corazón de las personas”.
Los prelados aprovechan el mensaje para recordar que el matrimonio está formado por un hombre y una mujer al poner énfasis en “el significado esponsal de la diferencia sexual, la lealtad a la alianza establecida, la apertura y el cuidado de la vida” como “fuente de alegría personal y generadora de una inmensa fecundidad social”.
“El papa Francisco ha hablado repetidamente de un cambio de época marcado por desafíos económicos, políticos, culturales y tecnológicos que generan incertidumbre y pueden llevar a la desesperanza, pretendiendo reducir al ser humano a un mero individuo, fácilmente manipulable por los poderes que buscan intereses egoístas”, alertan.
De la misma manera, advierten que vivimos en una “sociedad herida por el aislamiento, la soledad y la ruptura de los lazos comunitarios”. Frente a ello, “la familia es la primera y fundamental estructura en la que se aprende el sentido de la solidaridad, la gratuidad y el cuidado del otro”. Por ello, se muestran convencidos de que “la familia cristiana es llamada a ser testigo de esta misericordia divina, que no se cansa de perdonar y de renovar todas las cosas”.
Con este punto de partida, y mirando al Año Santo que abrirá el papa Francisco esta Nochebuena, los pastores presentan a Jesucristo como “el jubileo permanente” y la verdadera esperanza. A Jesús de Nazaret encomiendan los obispos a “las familias que pasan por momentos de prueba, quienes sufren la enfermedad, la pérdida de seres queridos, la pobreza o la incomprensión”. “¡No perdamos la esperanza!”, remarcan desde la subcomisión presidida por José Mazuelos Pérez, obispo de Canarias.