Los obispos ecuatorianos exigen al Gobierno que aparezcan “sanos y salvos” los cuatro menores desaparecidos tras operativo militar

Los obispos ecuatorianos se han pronunciado sobre la desaparición de cuatro adolescentes el 8 de diciembre en un operativo militar en Guayaquil, al suroeste del país, en vísperas de Navidad. Van más de dos semanas que no se sabe de su paradero.

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Se trata de Josué e Ismael Arroyo (14 y 15 años), Saúl Arboleda (15años) y Steven Medina (11 años), quienes fueron aprehendidos por una patrulla militar. Así confirmó a medios locales, Giancarlo Loffredo, ministro de defensa.

Lamentó la forma como se procedió, incluso allanaron la base militar de Taura – a 35 km de Guayaquil – donde supuestamente fueron recluidos, pero no se encontraban en el lugar.

El caso ha conmocionado al país. El presidente de la República, Daniel Noboa, ordenó intensificar los operativos de búsqueda 14 días después de la desaparición.

Ha pedido que “se encuentren a todos sus responsables para que respondan por sus actos frente a la justicia y al país”, escribió en su cuenta de X.

Solidaridad con las familias

Los prelados recordaron al Gobierno que tiene el “deber de defender la vida y la integridad de todos los ciudadanos sin importar su edad, su género, su condición social”.

Denunciaron que estas situaciones, amén de conmover las entrañas de todos los ecuatorianos, expresan “la indefensión en la que nos encontramos todos frente a la violencia que corroe nuestras instituciones y nuestras relaciones”.

“Las madres y padres que lloran la desaparición de sus hijos necesitan volver a tenerlos en sus brazos, sanos y salvos en casa, y eso sin tardanza alguna”, han dicho.

A vísperas de la Navidad “nosotros como Pastores de la Iglesia Católica, abrazamos a los padres y familiares de Josué, Ismael, Saúl y Steven y comprometemos nuestra ayuda para sostenerlos en estos momentos de inquietud y dolor”.

Piden a las autoridades esclarecer los hechos, porque “el Ecuador necesita la verdad, y el compromiso de todos de erradicar la violencia que hiere y lastima nuestro presente y futuro”.

Foto: Diario Primicias