La Fundación Benito Menni Hermanas Hospitalarias ha sido galardonada con el Premio Salud por su proyecto ‘La Ciudad de los Olvidados’, una iniciativa humanitaria en Togo, a 65 kilómetros de Dapaong, que atiende a personas con enfermedades mentales en condiciones extremas de vulnerabilidad. Esta iniciativa que se materializar en el Centro de Salud Mental Yendube, busca rehabilitar y reintegrar a personas marginadas, muchas de las cuales vivían encadenadas o confinadas debido al estigma social que asocia su condición con creencias sobrenaturales. O lo que es lo mismo, los enfermos mentales llegan a sufrir todo tipo de torturas al ser considerados ‘personas embrujadas’.
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Al recoger el galardón, Dolores Jiménez Avilés, religiosa de la Congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, hizo hincapié en cómo esta particular ‘urbe’ de acogida aúna ciencia y caridad: “Ofrecemos una atención integral a las personas: humana, técnica, espiritual y religiosa. Realizamos la misión sanadora de la Iglesia a través de la vida hospitalaria, iluminando nuestro hacer por valores humanos que tienen sus raíces en valores evangélicos”. Junto a la consagrada, también acudieron a CaixaForum de Madrid Juan Romero, Gema Romero, Clara Gómez y Julia Gómez, colaboradores de la Fundación Benito Menni, comprometidos con la misión de Hermanas Hospitalarias.
El objetivo central de ‘La Ciudad de los Olvidados’ es proporcionar atención psiquiátrica de calidad, rehabilitación y reintegración comunitaria. Este esfuerzo no solo transforma la vida de las personas atendidas, sino que también busca cambiar la percepción social hacia la enfermedad mental, combatiendo el estigma que dificulta su inclusión educativa, laboral y social.
Compromiso con la hospitalidad
Desde su creación en 2004, la Fundación Benito Menni trabaja por el derecho a la salud mental en regiones vulnerables de América, África y Asia. Promueve proyectos de atención psiquiátrica, rehabilitación y dignificación de personas marginadas, muchas en situación de calle. Sus programas incluyen consultas móviles, prevención y reinserción social. Además, fomenta la educación y formación de jóvenes en contextos de pobreza.
‘La Ciudad de los Olvidados’ representa un compromiso continuo con los valores de hospitalidad, solidaridad y amor al prójimo. Este reconocimiento reafirma la importancia de la labor de la Fundación en mejorar la vida de los más vulnerables, abriendo caminos hacia una mayor conciencia y transformación social.