Los Mossos d’Esquadra registraron, durante el pasado 2024, un total de nueve incidencias, básicamente hurtos y robos en iglesias, santuarios, ermitas y centros parroquiales de la diócesis de Girona, dos más que en 2023 y tres menos que en 2022.
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Los datos se presentaron ayer, martes, 14 de enero, en el marco de la reunión de seguimiento que llevan a cabo periódicamente el Obispado de Girona y los Mossos d’Esquadra, establecidas por el plan de prevención de robos en los más de 1.100 templos del territorio.
Menor número de incidencias
Desde su despliegue y puesta en marcha en 2010, el dispositivo ha permitido reducir considerablemente las incidencias gracias al contacto fluido entre las comisarías y los diferentes arciprestazgos, que ha ido en aumento en los últimos años. También se valora especialmente el asesoramiento y los consejos de seguridad en las parroquias sobre nuevas estafas, así como la difusión de campañas.
En el encuentro participaron, por parte del Obispado, el obispo de Girona, Octavi Vilà, y el vicario general, Lluís Suñer; y por parte de los Mossos, la comisaria jefe de la Región Policial de Girona, Sílvia Catà, y la subinspectora Eva Subirà.
