“Las condiciones del Santo Padre siguen siendo críticas. Sin embargo, desde ayer por la tarde no ha presentado más crisis respiratorias“. Así lo ha anunciado a última hora de esta tarde el Vaticano a través de su Oficina de Prensa, que ha especificado que las transfusiones de sangre los valores de la hemoglobina han subido.
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Sin embargo, los análisis de sangre hechos al Papa revelan que padece una “insuficiencia renal inicial leve, actualmente bajo control”. Asimismo, continúa con oxígeno a través de cánulas nasales. “El Santo Padre continúa consciente y bien orientado”, añade el Vaticano. “La complejidad del cuadro clínico y la espera necesaria para que las terapias farmacológicas den alguna respuesta obligan a que el pronóstico siga siendo reservado”.
Misa en su habitación
Por otro lado, el Papa ha continuado hoy con su actividad: “Durante la mañana, en el apartamento habilitado en el piso 10, participó de la Santa Misa junto a quienes lo cuidan durante estos días de hospitalización”, explica el comunicado.
