El arzobispo de Barcelona ofrece una visión renovada del autor de la Sagrada Familia
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Título: Gaudí: El hombre, el artista, el cristiano
Autor: Lluís Martínez Sistach
Editorial: Ciudad Nueva, 2014
Ciudad: Madrid
Páginas: 144
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FERNANDO CORDERO (SS.CC.) | El cardenal Lluís Martínez Sistach fue el artífice de la dedicación de la Basílica de la Sagrada Familia de la Ciudad Condal, obra del arquitecto Antoni Gaudí, ceremonia que presidió Benedicto XVI en 2010. Recientemente, el papa Francisco ha destacado este templo como uno de los tres lugares especiales para pedir por los frutos de los sínodos de los obispos de 2014 y 2015. En este volumen, el arzobispo de Barcelona ofrece unas meditaciones espirituales, para acompañar a Gaudí en su itinerario de la “catedral del siglo XXI”, con la elegancia estética de la austeridad de sus tres fachadas: del Nacimiento, de la Pasión y de la Gloria. Cuenta con el transfondo de la interpretación magistral del papa emérito.
El “arquitecto de la luz” o el “Dante de la Arquitectura” –apelativos de Benedicto XVI– es modelo de laico. Su gran pretensión fue evangelizar con su templo. Las tres fachadas son magnos retablos al aire libre que permiten “una Iglesia de salida”, como requiere el papa Bergoglio.
La primera parte, dedicada a la fachada del Nacimiento, muestra la juventud vitalista del arquitecto. Prefirió comenzar por esta fachada coincidiendo con la liturgia de la Iglesia: el misterio del nacimiento de Cristo precede y prepara el misterio de la Pascua. Está concebida como un gran belén en el que se manifiesta la concepción ecológica de Gaudí y su convicción de que la naturaleza es una primera forma de revelación de Dios. De ahí las plantas más diversas y animales más humildes. Nos muestra, además, la personalidad del arquitecto y la importancia de santa María y de san José en esta iglesia emblemática.
Volver al origen
En el centro, la fachada de la Pasión, el encuentro con el sufrimiento, verdadero himno a Cristo Redentor. A diferencia de la del Nacimiento, es dura, pelada, como hecha de huesos. Expresa la verdad y el dolor de la vida. Es un enorme “vía crucis”. Junto al “libro de la naturaleza”, el arquitecto comparte su lectura del “libro de la Sagrada Escritura”, por lo que afirma:
La originalidad consiste en volver al origen.
La parte final y principal es la de la fachada de la Gloria, a partir del Bautismo y de la Eucaristía. Es la síntesis de toda la vida humana: creada, redimida, salvada y glorificada por Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, con una catarata de símbolos, culminación de la reflexión religiosa del místico Gaudí.
El cardenal Martínez Sistach no olvida en sus páginas a los santos catalanes y a san José Manyanet, inspirador del templo. En verdad, se trata de un librito imprescindible para aquellos que quieran acceder sencillamente desde la fe a esta arquitectura de la belleza, sin arrinconar el contexto social y eclesial, junto con los retos actuales.
En el nº 2.906 de Vida Nueva
