JOSÉ BELTRÁN | Director editorial de Vida Nueva
JUEVES 7. Reflexión sobre la misión compartida al estilo Emaús. Dos caminando a la solana y el Espíritu soplando. A favor, siempre, aunque venga de frente. En el horizonte, un laicado comprometido sin relación contractual. Ahí es nada.
VIERNES 8. El equipo de la Delegación de Misiones se renueva. Ímpetu que nada tiene que ver con la edad. Uno que tiene callo intenta no contagiar desilusión cuando alguien cuenta que nunca pudo entregar en mano el material del Domund de la pasada campaña porque aquellas parroquias a las que fue tenían las puertas cerradas. Solo se abrían para las vísperas y la eucaristía. A las puertas, se queda lo demás, se quedan los demás.
SÁBADO 9. Congreso de Cáritas en El Escorial. En un descansillo, un desfile de pectorales como el del Papa. No están hechos a posteriori, venían con ellos de fábrica, años antes. América hace rebaño. Lo sabe el arzobispo de Sucre, que ya tiene su App de Vida Nueva instalada en el iPad para que no se le escape una. O el cardenal Lacunza, que no presume de solideo púrpura, pero sí asume la responsabilidad del purpurado. Otros mientras buscan en Roma un tendero que venda perfume con olor a oveja. La esencia del Buen Pastor no se vende en frasco, se cultiva en la caridad. ¿El regalo del día? Conocer a Rosa Chávez, aquel que entendió al beato Romero antes, durante y después.
LUNES 11. Cambios en Madrid. Se mueven fichas en el tablero. Entran nuevas. Ya tocaba. Vicarios que se esfuman cual auxiliar. Vicarías que nacen para presencia en la sociedad.
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En el nº 2.941 de Vida Nueva.
