JESÚS SÁNCHEZ CAMACHO | Profesor CES Don Bosco
En el nº 504 del 8 de enero de 1966, Pérez Martínez entrevista al periodista y escritor Manuel Lozano Garrido. Era su médico. En un tercer piso de su casa de Linares, ‘Lolo’ revela al doctor la unión de “parentesco espiritual” con el director de Vida Nueva, José María Pérez Lozano. Desvela su gran pasión: el periodismo. “Yo me he formado en el periodismo, le debo mucho al periodismo, me ha enseñado a conocer la vida, a encarnar mejor las ideas, a retratar, como un fotógrafo, la vida cotidiana y hacerla más concreta”.
El director y fundador de la revista Cruzada, colaborador de Signo y Vida Nueva habla de sus novelas con tanto orgullo como respeto a su perseverancia: “Me ha costado mucho trabajo físico y mental, he querido afrontar, sin titubeos, el trascendental problema de la presencia del dolor en el mundo”.
En la entrevista, ‘Lolo’ mantiene su ilusión. Dice haber calculado vivir quince años más para escribir todo lo que le “bulle, como esos fantasmas de Gironella, del cerebro. (…) Tengo que aprovechar esta fiebre de escribir. (…) Tengo que aprovechar estas rachas de salud porque la suerte y yo somos antípodas”.
En la actualidad siguen existiendo muchos Lolos. Y no pocos tienen el coraje de sortear los obstáculos que, por ignorancia, la sociedad pone en su camino. Es hora de prestarles atención y cumplir la Convención Internacional de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (2006), tratándoles con igualdad.
En el nº 2.972 de Vida Nueva
