A diferencia de los primeros dos días, cuando la 36ª Asamblea Ordinaria del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) reflexionó sobre la “conversión pastoral” y valoró los informes que fueron presentados, la tercera jornada condensó cuatro importantes efemérides: 20 años del Sínodo de las Américas, 75 años del Secretariado Episcopal de América Central (SEDAC), 100 años del natalicio del beato mártir Óscar Arnulfo Romero, y 175 años de la creación de la diócesis de San Salvador.
Si bien es cierto que desde el inicio de la Asamblea, el pasado 9 de mayo, las expectativas por estos momentos celebrativos se concentraba particularmente en la figura de monseñor Romero –cuya causa de canonización continúa su curso, según ha informado el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas–, la agenda del 11 de mayo también reveló distintas expresiones de colegialidad de la Iglesia en el continente y, particularmente, en América Central.
El acto celebrativo de los 20 años del Sínodo de las Américas puso en evidencia la necesidad de continuar fortaleciendo los lazos de comunión, diálogo y colaboración entre los obispos del continente, como ya se había expresado durante el Jubileo Extraordinario de la Misericordia en el Continente Americano, en Bogotá, en agosto del año pasado.
En este sentido, la conferencia del vicepresidente de la Pontificia Comisión para América Latina, Guzmán Carriquiry, titulada ‘El Sínodo de las Américas y sus repercusiones en el Continente’, ofreció importantes elementos sobre el significado y los frutos pastorales del Sínodo, así como los desafíos que representa “el intercambio de dones y talentos entre las iglesias, enraizadas en sus culturas”.
Los migrantes son el futuro de la Iglesia en Canadá
La colaboración entre las iglesias se presenta como respuesta a algunas acuciantes realidades del continente, como lo expuso el obispo de Bathurst (Canadá), Daniel Jodoin, al compartir que ante la actual crisis de vocaciones sacerdotales –con tan solo 20 seminaristas en todo el país–, cada vez es más claro que “el futuro de la Iglesia en Canadá son los migrantes”.
El tema de la migración en el Continente también estuvo presente en la celebración de los 20 años del Sínodo de las Américas, a través de un panel donde se abordó ‘La migración en el Magisterio latinoamericano’, por parte del secretario adjunto del CELAM, Leonidas Ortiz Lozada, y ‘La migración en las obras de Iglesia’, asumido por el obispo presidente del Departamento de Justicia y Solidaridad del CELAM, Gustavo Rodríguez Vega, quien propiamente se refirió a la red CLAMOR (Consejo Latinoamericano de Movilidad Humana y Refugio).
Además, el obispo de Coautitlán en México, Guillermo Ortiz, y el director de la oficina scalabriniana internacional de migraciones, Leonir Chiarello, compartieron sus experiencias significativas con migrantes.
75 años del SEDAC
En la tarde, los participantes de la Asamblea se desplazaron al seminario San José de la Montaña, donde tuvo lugar el acto conmemorativo de los 75 años del SEDAC. “El SEDAC es un ‘preludio’ del CELAM”, reconoció el cardenal Rubén Salazar Gómez, presidente del CELAM, antes de entregar un pergamino al arzobispo de San Salvador, quien también es el presidente del SEDAC, exaltando la labor del organismo eclesial en la animación pastoral de la región.
La ocasión fue propicia para recordar los orígenes del SEDAC, gracias a la gestión realizada en su momento por el arzobispo Luis Chávez y González –predecesor de monseñor Romero en la sede de San Salvador– a quien Escobar Alas se refirió como “un adelantado de la Doctrina Social de la Iglesia y del Concilio Vaticano II”. Fue justamente en el seminario de San José de la Montaña donde se llevó a cabo la primera reunión de los obispos centroamericanos, cuando se constituyó el SEDAC. “Antes era un obispo por país, ahora somos más de 60”, agregó el arzobispo de San Salvador.
A continuación, los asambleístas peregrinaron al lugar donde monseñor Romero fue martirizado: el Hospitalito de la Divina Providencia, donde vivió y se encuentra la capilla en la que celebraba la eucaristía aquel 24 de marzo de 1980, cuando una bala atravesó su corazón.
Actualizar el legado de Romero
El mensaje de monseñor Romero para el continente americano fue el tema de la conferencia que, posteriormente, presentó el obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez, en la cripta de la catedral metropolitana donde reposan los restos del mártir, como una forma de evocar y actualizar su legado, al cumplirse cien años de su nacimiento.
Concluyó la jornada con una sentida eucaristía en la catedral para conmemorar los 175 años de creación de la diócesis de San Salvador.
