Misericordia. Eso es lo que reclama el cardenal Peter Turkson a la Unión Europea. El prefecto de la Congregación para el Servicio del Desarrollo Humano Integral pide altura de miras y una visión global para evaluar el fenómeno de la inmigración con la mirada puesta en la historia. Y ofrece la ayuda del Vaticano: “Estamos a disposición de todos aquellos que quieran tener un debate serio sobre esta cuestión”.
¿La solución al problema de la migración está en Europa o en África?, pregunta el periodista en la entrevista que el purpurado ha concedido a la edición italiana de Huffington Post. “Está en Europa y en África”, responde. Y añade: “Hay un enorme retraso desde un punto de vista cultural y político sobre este fenómeno histórico de enorme calado” y “lo que está en juego es la humanidad”.
Así, el ghanés señala que “una visión política común de este fenómeno ayudará a Europa a levantar la cabeza y ser modelo de paz, justicia y libertad”, porque “Europa ya no es Europa” y “es urgente que Europa puede volver a ser Europa”.
Duka alerta sobre el peligro de la inmigración musulmana
La Iglesia checa ha sido criticada por oponerse a la admisión de refugiados de Siria e Irak, pese a las llamadas de hospitalidad del Papa. ¿Una crítica acertada? El cardenal arzobispo de Praga, Dominik Duka, advierte de que los musulmanes solo pueden ser considerados una “presencia segura” si representan menos del 5% de la población.
El primado de la República Checa, que habla de números dejando al lado a las personas, manifiesta que su país no puede aceptar migrantes a menos que “respetan su sistema de valores”. Y es que “si nos fijamos en todo el mundo musulmán, no encontraremos un solo país donde haya democracia, libertad religiosa o igualdad de género”, señala en una entrevista al semanario checo Echo 24.
El purpurado indica que cuando los musulmanes representen más del 15% de la sociedad podrían comenzar a exigir “posiciones clave en la sociedad” o “asumir el control del Gobierno e imponer la sharia” si pasan del 25%. Y vaticina que el 90% de los católicos de su país opinan como él.
Lombardi elogia al “maestro” Navarro-Valls
Federico Lombardi sucedió a Joaquín Navarro-Valls, fallecido ayer 5 de julio, en la Oficina de Prensa del Vaticano. Pero su relación viene de largo, pues el jesuita trabaja en Radio Vaticano desde 1991 y cubrió varios viajes de san Juan Pablo II, siempre acompañado de su “agradable, amable y cordial” portavoz.
Navarro-Valls tenía una relación directa con Wojtyla que conocía “con seguridad y claridad sus pensamientos” y podía presentarse al mundo como “un intérprete autorizado de su pensamiento y no como alguien que habla de oídas”. En sus palabras, se trata de “un modelo de dedicación al servicio del Papa y de la Iglesia, y un maestro en comunicación inimitable”, según dijo a Radio Vaticano.
Su cercanía al Papa le hace ser considerado como “una de las figuras importantes de este extraordinario pontificado, no solo por su visibilidad pública, sino también por su papel de intervención y asesoramiento”. Y es que “Juan Pablo II tenía una gran confianza en él y una gran estima por su servicio”.
