Tribuna

Un domingo en la plaza de la vida

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Son las 15.50 del domingo 25 y estoy camino a la Facultad de Derecho en el auto con mi amigo fotógrafo Enrique Cangas, yendo por Salguero; doblamos a la izquierda por Figueroa Alcorta, claro…, nos damos cuenta que era para la derecha, entonces retomamos por Avenida del Libertador y el asombro de ver cuadras y cuadras de familias enteras yendo hacia la plaza por la vida….

Cuando llegué y me instalé en el escenario, fui uno de los tres presentadores junto a Rolando Vera y a María Ester Sánchez, grandes presentadores, lo primero que les dije es que hagan lugar porque viene una caravana de 20 cuadras de familias, estallaron en aplausos…

Cuando comenzó oficialmente el evento por la vida, fueron desfilando diferentes testimonios vivientes….

Una increíble Patricia Sandoval con una mochila con un pasado tremendo relacionado al aborto y ahora contando lo que fue su vida: tres abortos y todo lo que le decía y la convencían para realizar cada uno.

Después llego Luciana, una nena de 19 años, una nena, si! Mientras ella misma contaba cómo pudo seguir con su embarazo a los 17 años, yo tenía una foto enorme de su bebe recién nacido con ella aún con una cofia en la cabeza… muchísima ternura…

Luego llegaron los Weber, una familia de Villa Regina (provincia de Rio Negro): mamá, papá y Cristian, de 30 años que venía a contar todo el amor recibido como hijo nacido del corazón de esa mamá…

Y en ese momento me pregunta Rolando Vera si yo era también adoptado. Entonces empiezo a contar brevemente mi historia en tres minutos y demostrar el orgullo que sentía de serlo, que dos mamás hace ya 49 años se habían jugado por mi; la primera, la biológica que tuvo la oportunidad abortarme y sin embargo siguió adelante y luego Leonor, la más linda de todas, la que me abrió los brazos!!!

Sin dudas mis amigos, no solamente lo tomo ese momento, ese domingo en la plaza de la vida, como un gran regalo de Dios sino como un gran compromiso.

Queremos cuidar las DOS VIDAS

Que así sea!!!

Victor G. Balseiro
Orgullosamente adoptado