El papa Francisco ha salido hoy, como de costumbre, a las 12:00 horas a la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico para rezar el Regina Coeli con los miles de fieles congregados en la plaza de San Pedro. Llegados de todos los rincones del mundo, quisieron celebrar la solemnidad de la Ascensión del Señor y el Día Mundial de las Comunicaciones Sociales junto al Santo Padre en una mañana encapotada pero con una temperatura que superaba los 20 grados.
Sobre la festividad de hoy, 13 de mayo, ha recordado que, “por un lado, dirige nuestra mirada al cielo, donde el Jesús glorificado se sienta a la diestra de Dios”. Y, “por otro lado, nos recuerda el comienzo de la misión de la Iglesia: Jesús resucitado y ascendido al cielo envía a sus discípulos a difundir el Evangelio en todo el mundo”. Por lo tanto, “la Ascensión nos insta a mirar hacia el cielo, y luego inmediatamente hacia la tierra, llevando a cabo las tareas que el Señor resucitado nos confía”.
El papa ha explicado que se trata de “una misión sin límites, es decir, que excede las fuerzas humanas. De hecho, Jesús dice: “Id por todo el mundo y proclamad el Evangelio a toda criatura” (Mc 16, 15). ¡Parece realmente demasiado audaz la tarea que Jesús confía a un pequeño grupo de hombres simples y sin grandes habilidades intelectuales!” Sin embargo, “esta compañía dispersa, irrelevante para los grandes poderes del mundo, es enviada para llevar el mensaje de amor y misericordia de Jesús a todos los rincones de la tierra”.
“La evangelización requiere de nuestra colaboración”
Asimismo, Francisco ha dicho que “la misión confiada por Jesús a los Apóstoles ha continuado a través de los siglos, y continúa hoy: requiere la colaboración de todos nosotros. De hecho, cada uno, en virtud del bautismo que ha recibido, está capacitado por su parte para proclamar el Evangelio”.
Al término de la oración, el Papa ha querido lanzar un mensaje al pueblo de Indonesia: “Estoy particularmente cerca de las personas queridas de Indonesia, especialmente de las comunidades cristianas de la ciudad de Surabaya, que han sido afectadas por el grave ataque a los lugares de culto. Levanto mi oración por las víctimas y sus familiares. Juntos invocamos al Dios de la paz para detener estas acciones violentas, y en el corazón de todos no encontramos sentimientos de odio y violencia, sino de reconciliación y fraternidad”.
El Papa ha saludado también a los comunicadores, con motivo del Día Mundial de las Comunicaciones. “Saludo a todos los trabajadores de los medios, especialmente a los periodistas que están comprometidos con la búsqueda de la verdad de las noticias, contribuyendo a una sociedad justa y pacífica”, ha señalado, para luego pedir a toda la plaza que no se olviden de rezar por él.