Una de las opciones fundamentales de la pastoral juvenil es el servicio a los demás y el compromiso por la construcción del Reino de Dios, especialmente con los más necesitados. Expresamos así una premisa: la estrecha vinculación de la acción pastoral con el compromiso con los pobres y, en general, con un estilo de vida socialmente comprometido.
Partimos de la convicción de que la acción pastoral y la acción social no son dos dimensiones separadas, sino que ambas forman parte esencial y se entrelazan en nuestra gran misión como seguidores de Jesús y miembros de la Iglesia, que es evangelizar nuestro mundo. Así nos lo recuerda Francisco en ‘Evangelii gaudium’ (2013): “Evangelizar es hacer presente en el mundo el Reino de Dios”. Por ello, si la dimensión social de la evangelización no está debidamente explicitada, corremos el riesgo de desfigurar el sentido auténtico e integral de la misión evangelizadora (n. 176).
Un poco más adelante, en este mismo texto, Francisco continúa subrayando la conexión entre fe y servicio a los demás como elemento nuclear del mensaje de Jesús: “La aceptación del primer anuncio, que invita a dejarse amar por Dios y a amarlo con el amor que Él mismo nos comunica, provoca en la vida de la persona y en sus acciones una primera y fundamental reacción: desear, buscar y cuidar el bien de los demás” (n. 178).
Más recientemente, el documento preparatorio del Sínodo de los Obispos sobre ‘Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional’ destaca la vida cotidiana y el compromiso social como lugar de la acción pastoral. Ahí leemos: “La fe, cuanto más auténtica es, tanto más interpela a la vida cotidiana y se deja interpelar por ella”. Y algo más adelante: “Los pobres gritan y junto con ellos la tierra: el compromiso de escuchar puede ser una ocasión concreta de encuentro con el Señor y con la Iglesia y de descubrimiento de la propia vocación” (III. 3).
Participando de esta convicción, entendemos el compromiso con los más necesitados como una llamada y una aspiración fundamental que ha de impregnar el conjunto de nuestra labor pastoral y, dentro de ella, el trabajo entre y con los jóvenes.
Índice del Pliego
I. EL COMPROMISO SOCIAL, UN PILAR BÁSICO DE LA PASTORAL JUVENIL
II. COMPROMISO SOCIAL Y VOLUNTARIADO
III. EL COMPROMISO SOCIAL A LA LUZ DE LA FE CRISTIANA
- 1. La experiencia de Dios encarnado
- 2. La formación
- 3. La sensibilización
- 4. La transformación social como construcción del Reino
- 5. Una presencia social que evangeliza
IV. ALGUNOS ACENTOS PARA UNA PROPUESTA PASTORAL
V. PROPUESTA EDUCATIVA
- 1. Compromiso con el grupo de referencia
- 2. Servicios puntuales
- 3. Semanas y campañas de sensibilización
- 4. Campos de voluntariado
- 5. Experiencias de voluntariado continuo
- 6. Compromiso económico
- 7. Monitor/catequista de los procesos pastorales en grupo