Como ya es habitual en las inauguraciones de las Plenarias, los obispos estrenaron asamblea con una impactante información. Esta vez se denunciaban en eldiario.es unos cursos de la Diócesis de Alcalá para “curar” la homosexualidad. Los obispos la abordaron en sesión reservada y emitieron una nota –leída en rueda de prensa por el secretario general, Luis Argüello– en la que expresan su apoyo al obispo Juan Antonio Reig Pla y a su Centro de Orientación Familiar (COF), y muestran su rechazo “a la irrupción de un grupo de personas vociferantes en un templo donde se estaba celebrando la liturgia de la Iglesia”.
Según ha confirmado Vida Nueva, Reig Pla solicitó el apoyo de la Plenaria argumentando que lo sucedido con él, podría repetirse en las demás diócesis e insistió en que desde el COF no realizan terapias restaurativas, sino “simple asesoramiento”.
Reig Pla puso especial énfasis en el asalto que, a modo de protesta, sufrió la catedral de Alcalá, ataque que removió el malestar en gran parte de los obispos y despertó un sentimiento de “persecución”. “Ante esto, aún hay obispos que creen necesarias manifestaciones públicas más beligerantes, porque defienden que la Iglesia ha dejado de estar presente en la sociedad”, explica otro obispo que rebate esta tesis: “Sí que estamos activos en el tejido social, pero de otra manera: que se lo digan a Cáritas. Otra cosa es que echen de menos las misas de Colón o las manifestaciones que encabezaban determinados grupos”.
Espaldarazo de los obispos
En medio del debate, el presidente Ricardo Blázquez encomendó al secretario general elaborar una nota, pero no en nombre de la Conferencia. Pero lanzar la nota al final de la Plenaria supuso identificar a todos los obispos con la misma. “Fue un error. Sienta un precedente para cualquier incidente de que le suceda a otro obispo. Y no podemos emitir comunicados respondiendo en caliente cada vez que ocurre algo durante una Plenaria”, cuestiona un pastor.
En todo caso, Reig Pla recibió un espaldarazo de la Asamblea, pero también en su diócesis, e incluso de Hazteoír, que se concentró frente a la catedral alcalaína para darle su apoyo. Y varios de sus sacerdotes dedicaron sus homilías del domingo 7 a defenderlo, a resaltar su intervención ante el pleno episcopal y a señalar que, en un encuentro con curas, consideró que del estruendo periodístico “ha surgido una gran oportunidad”.
