“Los críticos de Francisco argumentan que un papa no debería preocuparse del medio ambiente. Es una crítica inaceptable”. Con esta contundencia se manifestó esta tarde el vicedirector editorial del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, durante la presentación en Madrid del libro “Una gran esperanza” (Romana Editorial), una obra en la que el Papa Francisco expone las líneas trocales de la ecología integral desde la encíclica Laudato si’.
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“Hay una renovada conciencia de la sociedad civil ante las cuestiones del medio ambiente y el cambio climático como nunca antes, a pesar del fracaso de la COP25”, comentó el que fuera portavoz del Papa, convencido de que “los jóvenes, creyentes y no creyentes, perciben que Francisco es el único líder mundial adulto que asume su responsabilidad ante las nuevas generaciones”. “Francisco nos llama a escuchar el grito de la tierra y de los pobres, la ‘escuchaterapia’ que ha centrado el Sínodo de la Amazonía”, expuso el periodista italiano.
Unidad de los cristianos
“Los cristianos, si se unen, pueden dar sentido a la humanidad” en materia medio ambiental, subrayó sobre la mirada ecuménica de este libro. Prueba de ello, es que está prologado por el patriarca de Constantinopla Bartolomé I. Por este motivo, acudió al acto el metropolita ortodoxo para España y Portugal, Policarpo.
El metropolita señaló que la cuestión medioambiental “es un gran problema teológico que se debe a la relación errónea del hombre con Dios y con la creación”. Es más, llego a afirmar que el hombre de hoy vive en “la apostasía de un solo Dios omnipotente, creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible e invisible”. Desde ahí, planteó la necesidad de promover “un estilo de vida ascético y eucarístico”. “Estamos en la hora cero”, aseveró.
Desafío epocal
El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, explicó cómo el cambio climático es un “desafío epocal como una gran oportunidad: no es un momento para la tristeza, sino una llamada a trabajar por el bien común”. Así, remarcó cómo el Papa “anima a que los protagonistas del cambio seamos todos los hombres”. Desde ahí, instó a los participantes en la presentación del libro a “atrevernos a convertirnos en custodios de la creación”. “No proteger la vida humana es un atentado contra la ecología integral”, sentenció.
El cardenal emérito de Barcelona Lluís Martínez Sistach calificó de “una gran decepción” el resultado de la COP25, un fracaso que para él se traduce en una mayor brecha “entre los políticos y el pueblo, representado cada vez más por las jóvenes generaciones”. Frente a ello, purpurado subrayó cómo el Papa “va al fondo al pedir una conversión, un cambio en el estilo de vida, elaborando una auténtica antropología”.
Hacer lo correcto
“Estamos en un momento decisivo de la historia”, reflexionó en voz alta el rector de la Universidad Pontificia Comillas y anfitrión del acto, Julio Martínez, que hizo suyo la petición del Papa para llevar a cambio un cambio personal y de estructuras: “O hacemos lo correcto para corregir el mundo o la humanidad entera se adentrará en dinámicas de autodestrucción que serán imparables”.
El religioso jesuita apreció que para que la agenda 2030 pueda realmente calar en el cambio que la humanidad necesita, debe alimentarse por la tradición cristiana. “Por suerte contamos con la hondura de la ecología integral recogida en ‘Laudato si’’”, comentó.
