“Busquemos la paz en la política”, ha pedido el presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), Walmor de Oliveira Azevedo, en su primer mensaje de este año, invitando a “promoverla en espacios y ambientes de trabajo”.
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En su saludo de inicio de año, el arzobispo de Belo Horizonte ha manifestado su deseo de que “la paz, fruto de la justicia, como nos enseñó [el profeta] Isaías, estén en el corazón, en la casa, en la familia y en la comunidad”.
Una nación más justa y solidaria
“La construcción de una nación más justa y solidaria es tarea nuestra mientras caminamos hacia el Reino definitivo”, subraya Oliveira, a través de un video-mensaje difundido por la CNBB.
Ante el latente peligro de la violencia y la guerra, la Iglesia brasileña aboga “por el fin de los conflictos y las polarizaciones extremas que solo provocan divisiones”.
“Resistir la tentación de perder la paciencia”
En este sentido, el presidente de la CNBB recuerda la vocación cristiana de “colaborar con Dios para la promoción de la paz en el mundo“, lo cual implica, a su vez, saber “resistir la tentación de perder la paciencia y no actuar de forma digna con cada hermano y hermana que se cruza en nuestro camino”.
Para ello, el obispo cita el ejemplo del Buen Samaritano que invita a “cuidar de cada persona abandonada, que necesita de nuestra promoción, dando nuestra mano como cristiano y como Iglesia”.
El valor del cuidado señala, por tanto, un horizonte que alienta y orienta “en la construcción de relaciones más fraternas“.
“Que 2020 sea un año de muchas realizaciones y de más unión en nuestro amado Brasil“, son los deseos de Walmor de Oliveira Azevedo, asegurando las oraciones y el compromiso de la CNBB “en la búsqueda de estos objetivos para vivenciar el Reino de Dios aquí en la tierra”.
Foto: Alexandre Rezende / Nitro
