Este lunes 24 de febrero se llevó a cabo en la Ciudad de México el coloquio ‘Construyendo la aldea de la educación: ideas y aportes’, organizado por el Grupo SM, y al que asistieron obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, así como directivos y representantes de institutos educativos en el país.
Los temas abordados durante la reunión fueron: ‘La Aldea de la Educación y la reconstrucción del Pacto Educativo’, a cargo del sacerdote José María Felices, vicepresidente de Grupo SM; ‘Educar para el Cambio. Tiempos educativos y tiempos tecnológicos’, dirigido por Claudia Castellanos; ‘Reconstruir la identidad’, por Héctor Sampieri, y ‘E-ducar la pregunta. En búsqueda de lo trascendente’, por Paola León.
Entre los asistentes estuvieron representantes de algunas diócesis mexicanas, como México, Tlalnepantla, Nezahualcóyotl, Valle de Chalco y Ecatepec; también maestros y directivos de escuelas administradas por algunas congregaciones religiosas como las Mercedarias del Santísimo Sacramento, las del Verbo Encarnado, las Siervas de la Inmaculada Concepción, las Religiosas de la Asunción, la Congregación de los Hermanos Maristas y la Congregación de Misioneros Oblatos de la Beata Virgen María Inmaculada, así como de la Confederación Nacional de Escuelas Particulares y de la organización de la sociedad civil Guardianes, entre otros.
Liderar desde una alianza
Entre las reflexiones vertidas, se habló de la importancia de liderar y enfrentar con valentía el cambio hacia el Pacto Educativo Global, y para ello es necesario asumir una buena estrategia de comunicación al interior y exterior de la Iglesia.
Se deberá contar con sensibilidad estratégica para confrontar y comprender las diversas realidades, y unir el conocimiento para ser generadores de cambio. Para los educadores, esto implicaría analizar qué y cómo lo enseñan, pero sobre todo, qué y para qué contexto educan. También es fundamental abrirse al otro para crear comunidad educativa.
Al hablar de la Pedagogía del Samaritano, en el contexto del Pacto Educativo, explicaron que ésta consiste en hacer alianzas globales; poniendo como ejemplo el pasaje bíblico en el que el samaritano “hace alianzas con el posadero y con el herido”; es decir, “acompañar al otro hasta encomendar a otro, y procurar y entender estos esfuerzos desde la empatía”.
La dinámica del coloquio consistió en las reflexiones por parte de los especialistas, seguidas de rondas de comentarios. En este contexto, la directora de la Fundación SM en México, Cecilia Espinosa, dejó en claro que la ética del cuidado es una referencia clave para este Pacto Educativo Global.
Una educación con identidad
El director del Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para las Ciencias del Matrimonio y de la Familia, sección México, Héctor Sampieri Rubach, abordó el tema de la identidad y la educación.
Habló de cómo llevar a cabo el encuentro para la reconstrucción social. Dijo que, en primera instancia, se debe poner a la persona en el centro, y amar a la persona desde su propia historia. En ese sentido, se refirió también a la importancia de que una comunidad educativa esté muy bien integrada.
Sampieri habló de la pedagogía de la esperanza, tan necesaria en nuestros tiempos, y de la importancia de rescatar los valores. Además exhortó a profundizar en el impacto de la pérdida de identidad, del desarraigo comunitario, de la falta de sentido y del ejercicio de la libertad en el día a día; todo esto, como un punto de partida para el encuentro y el diálogo que humanizan.
Al abordar este tema se hizo un llamado a tener cuidado de manera particular con la identidad digital, que en las generaciones actuales llega a ser totalmente distinta de la identidad.
Encontrar sentido a lo que se hace
Otro de los temas abordados en el coloquio fue la importancia de encontrar sentido a lo que se hace como comunidad educativa, sin perder el horizonte, al tiempo que se afirma el liderazgo y se trabaja para que las cosas sucedan. De esta manera –señalaron– se genera el contexto para que la persona quiera sacar lo mejor de sí: “esto es una escuela con identidad”.
Algunas de las advertencias a las comunidades educativas fueron en el sentido de no fijarse solamente en las nuevas tecnologías, sino recordar siempre lo “tradicional”, pues esto permite construir. De igual modo se hizo un llamado a no olvidar las brechas económicas y políticas, ya que éstas pueden generar una educación que discrimina. También pidieron valorar el cambio de paradigma y la ética del cuidado como punto indispensable para crear un Pacto Educativo Global. Sólo de esta manera –apuntaron– es posible generar comunidades y crear consensos, y entrar en una dinámica de ‘ganar-ganar’.
Finalmente, se habló de la necesidad de unirse para construir algo juntos o para reconstruir algo que se ha fracturado. Y al hablar sobre la Pedagogía de la Pregunta se lanzaron cuestionamientos sobre cómo construir un pacto sin conocernos y cómo ayudar para que los educadores sean capaces de leer la realidad digital de una manera creyente.
Al finalizar la reunión, los asistentes recibieron un ejemplar del libro ‘Escuelas que futurean’, de José Laguna (PPC, 2020), no sin antes llegar al acuerdo de organizar una siguiente reunión para poner en común buenas prácticas entorno a la propuesta del Santo Padre, el papa Francisco.