El Centro de Investigación y Formación Interdisciplinar para la Protección del Menor (CEPROME), con sede en la Universidad Pontificia de México (UPM), difundió un videomensaje que dirige el papa Francisco a quienes integran el centro, alentándolos en su misión.
El video fue grabado luego de un encuentro que sostuvo el Santo Padre con el sacerdote mexicano Daniel Portillo Trevizo, director del CEPROME, principal centro latinoamericano dedicado a la capacitación en la lucha contra los abusos sexuales en la Iglesia.
En su mensaje, el Papa se dirige a ellos como ‘apóstoles de la prevención’. “Sé que están luchando por todas partes para prevenir; prevenir con la fuerza del bien, toda la destrucción que hace el mal. Cuando uno ve lo que es capaz de destruir el mal, a veces se bajonea, la pierde. No, eso no”.
“Al mal se le puede vencer siempre. Es un vencedor de pocos días, de poco tiempo, no puede prometerse una victoria de siempre, tiene poca vida, pero hay que luchar para vencerlo, no hay que asustarse; y sé que se sufre con esto”, añadió.
Un acto de amor muy grande
El Santo Padre también exhortó a los miembros del CEPROME a seguir trabajando: “van a ser incomprendidos, les van a decir que pierden el tiempo, los van a amenazar, porque también hay gente que amenaza. Y más de uno les va a decir que es capaz de alquilar un sicario para limpiar el campo. Sean prudentes, cuídense, pero sigan siendo valientes y trabajen”.
Finalmente, les recordó que “prevenir los abusos de niños, prevenir los abusos de gente que está disminuida por situación social, por enfermedad, lo que sea, es un acto de amor muy grande; sigan adelante, y que Dios los bendiga y recen por mí también”.
Durante el encuentro que sostuvo el sacerdote Daniel Portillo con el Papa le habló del trabajo realizado por el CEPROME; asimismo, le habló del libro del cual es autor, titulado ‘Tolerancia cero. Estudio interdisciplinar sobre la prevención de los abusos en la Iglesia’, que arroja un diagnóstico y propuestas teológicas ante el problema del abuso sexual.
Dicho libro –según afirma en el prólogo Hans Zollner, presidente del Centre for Child Protection (CCP) de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma– “responde a las preocupaciones y urgencias del Santo Padre. Esperemos que, junto con él, avancemos hacia una Iglesia en la que el abuso de poder, la violencia sexual, el encubrimiento y el fariseísmo ya no tengan cabida”.