El Papa está convencido de que “en estos momentos de pandemia que estamos viviendo, Dios nos pide que seamos más cercanos. Quizá no podemos acercarnos físicamente por miedo al contagio, pero tenemos que despertar la cercanía en la oración y de otras maneras”.
Así lo ha expresado esta mañana en la eucaristía desde la capilla de Santa Marta, retransmitida en directo una vez más ante la cuarentena por el coronavirus. “No nos lavemos las manos” ante el dolor de los otros, advirtió en su homilía.
La tentación de alejarse
Francisco recordó “el Señor da la ley a su pueblo con una actitud de cercanía: no son prescripciones de un gobernante alejado o de un dictador, sino que se trata de un Padre que acompaña a su pueblo con él dándole el don de la ley”. “No es un Dios que deja las prescripciones escritas y se va. Las escribe con sus propias manos sobre la piedra, se las entrega a Moisés y camina con su pueblo. El nuestro es un Dios de la cercanía”, detalló el Papa”.
“Nosotros, en cambio, nos alejamos de Dios cuando Él se hace cercano. Está en las dos primeras páginas de la Biblia: Adán y Eva se esconden de la cercanía de Dios, porque han pecado y tienen vergüenza y miedo”, meditó el Papa, que señaló cómo está actitud lleva, en ocasiones, a generar “una teología solamente centrada en el juicio”.
La muerte en la cruz
Esta cercanía de Dios, admitió el Papa, le lleva hacerse débil al encarnarse. “Lo vemos en Jesús hecho hombre, que acompaña a los discípulos en todo momento con amor”. Es más, Francisco expresó cómo “esta debilidad le lleva a la muerte en la cruz, la muerte de los pecadores más grandes. La cercanía humilla a Dios, se humilla para estar con nosotros, para caminar con nosotros, para estar con nosotros. El Dios cercano nos habla de humildad, es uno más en casa”.
En su plegaria inicial, Francisco rezó por los difuntos, “por aquellos que a causa del coronavirus han perdido la vida, de manera especial, quisiera que rezáramos por los trabajadores sanitarios que en estos días han dado su vida en el servicio de los enfermos”.
