El Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) Colombia, en un informe, ha denunciado que una gran cantidad de migrantes venezolanos se han visto presionados a retornar a su país por las autoridades locales y además “no cuentan con las mínimas garantías de protección y dignidad humana necesarias para regresar en medio de la pandemia”.
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Con las medidas de aislamiento social obligatorio, la situación ha empeorado –señalan– porque “muchos de ellos viven del día a día, de trabajos informales, conviven hacinados en espacios muy reducidos o no tienen acceso a servicios públicos como el agua, un elemento vital durante esta pandemia”.
“Dado el temor y la vulnerabilidad en que se encuentran los y las migrantes, regresar es una opción mucho más segura que quedarse en Colombia”, han expresado desde el JRS Colombia.
Ni voluntario ni seguro
Con el paso de la cuarentena el problema se agrava. La situación se evidencia en las carreteras de Colombia, donde se vuelven a ver caminantes, quienes desconocen las dificultades que se pueden vivir en el trayecto debido a las medidas internas de cada departamento como “las condiciones que encontrarán al llegar a Venezuela”.
De hecho han denunciado que “las autoridades territoriales gestionan esta salida masiva argumentando voluntariedad en el retorno, sin percatarse de los riesgos ni prever las condiciones del traslado”, por tanto “el retorno no puede ser la alternativa para solucionar el reto que implica la presencia de migrantes”.
En este sentido han hecho “un llamado a las autoridades nacionales y locales, para que de manera decidida identifiquen acciones complementarias a las ya existentes, de tal modo que la población migrante y refugiada no se siga viendo doblemente afectada ni se vea obligada a retornar en las actuales condiciones de riesgo”.
Ejercicio de monitoreo
Pese a los esfuerzos de las autoridades en los puntos fronterizos junto con organizaciones humanitarias y de sociedad civil para dar respuesta ante esta emergencia, para el JRS “es preciso entender que el desconocimiento de los factores a los que se está exponiendo a esta población puede ponerlos en una situación crítica de riesgo de vulneración de su vida y dignidad humana”.
Para ello han puesto en marcha un ejercicio de monitoreo “con el ánimo de generar conciencia social sobre esta situación en particular” a fin de identificar situaciones de vulneración de derechos humanos en Cúcuta, uno de los puntos fronterizos más transitados en el país, de tal forma evitar su repetición.
El JRS reitera que los venezolanos tienen el derecho al retorno digno, por lo cual debe respetarse. Al tiempo piden a las autoridades “entregar información clara y veraz de las implicaciones e incertidumbres que implica su retorno”.
Foto: PMV
