Con la romería suspendida, sin campanil y la imagen de la Virgen del Rocío en la parroquia de Almonte y no en el santuario de la aldea, la celebración del domingo de Pentecostés ha sido inusual en las marismas. Una jornada en la que se ha celebrado la misa en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. En dicha celebración el párroco de Almonte, Francisco Jesús Martín Sirgo, ha dado a conocer el mensaje enviado por el papa Francisco a todos los rocieros.
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Un año jubilar que se prolonga
Firmado por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, el pontífice saludoa a quienes viven en esta ocasión la fiesta como una “peregrinación espiritual a la ermita de Almonte”. A los rocieros, les pide que “sigan caminando hacia Dios entre las marismas de la vida y, con el ejemplo de María, la sin pecado, sepan cantar con palabras y obras la misericordia divina a todas las gentes”.
Además, en la misa se ha recordado que la Penitenciaría Apostólica ha prorrogado, hasta el final de la pandemia, el año jubilar que con motivo del centenario de la coronación canónica de la Virgen del Rocío se estaba celebrando. “No hemos podido hacer la peregrinación por los caminos, detrás del ‘Simpecado’; no hemos podido compartir los momentos de comida y descanso con tantas personas que amamos, disfrutando de su compañía… Pero sí hemos podido pensar, añorar, rezar, recordar en nuestras casas entrando más en nuestro interior, y ahí́, siempre está la Virgen», ha señalado el obispo José Vilaplana en su homilía.
Sin el salto de la reja
La noche ha estada marcada por la nostalgia, sin poder los almonteños poder saltar la reja –en 2019 se produjo a las 2:49h.– para iniciar la procesión por la aldea. En su lugar, la Hermandad Matriz ofreció un concierto de Ainhoa Arteta, con 6 temas marianos. Con el título “Notas de Luz, a Ti, Rocío”, la soprano ha estado acompañada por el pianista Javier Carmena.
El Rosario de Hermandades, pensado para ser transmitido y no desde la plaza de El Rocío, ha contado con el cantante José Manuel Soto –acompañado por algunos miembros de su familia y el coro de la hermandad–. La noche ha seguido con el estreno, a la 1 de la madrugada de un documental, “Rocío. Todo empezó una mañana”, que ha repasado los actos del centenario. Después, durante toda la noche, desde poco después de las dos de la madrugada, la señal en directo con la imagen de la Blanca Paloma se ha mantenido para que pueda ser venerada por los devotos a través de las redes. Un Rocío íntimo y transformador el de 2020. El “¡que todo el mundo sea rociero!” de Juan Pablo II hace 25 años ha permitido este año a todo el mundo estar espiritualmente presente en la aldea.