Los obispos de Corrientes (Argentina) dieron a conocer una declaración titulada “Tiempo para hacer historia”, ante las próximas elecciones ejecutiva, legislativas y municipales del ámbito provincial.
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Los cuatro obispos (Andrés Stanovnik, ofm y José Larregain, ofm, titular y auxiliar de la Arquidiócesis de Corrientes; Adolfo Canecín, obispo de Goya, y Gustavo Montini, obispo de Santo Tomé) marcaron el escenario que plantó la pandemia: pobreza creciente, conflictividad social preocupante, y grave riesgo sanitario.
Expresaron que para algunos las elecciones pueden generar cierta esperanza, para otros carece de significación. Esta realidad, dicen los obispos, reclama la responsabilidad de todos y pone a prueba, una vez más, “nuestra fe, esperanza y caridad”.
Paz social
Los pastores consideraron que estas elecciones se presentan como una oportunidad para todos: para los candidatos que se postulan y para los ciudadanos.
Con respecto a los que viven la vocación política y desean ejercer una función pública, les reconocen la labor política que desempeñan. Recordaron las palabras de Pío XI que consideró la política como una de las formas más altas de la caridad. “Quienes la ejercen con honestidad y entrega, muchas veces los lleva a sacrificar sus tiempos, su privacidad y sus propios intereses en pos del bien de los demás”, dijeron.
Asimismo, les reclamaron integridad moral, propuestas claras, concretas y realizables para que los más frágiles de la sociedad puedan acceder a una salud integral, a la tierra, el techo y el trabajo, “como verdadero camino de paz social”.
También pidieron que perseveren en el diálogo y en la construcción de consensos, tanto con sus pares como con los que opinan distinto, en una permanente escucha al pueblo que los eligió. “Los otros son constitutivamente necesarios para la construcción de una vida plena. La conciencia del límite o de la parcialidad, lejos de ser una amenaza, se vuelve la clave desde la que soñar y elaborar un proyecto común” (Fratelli tutti, 150).
Sus palabras fueron dirigidas, una vez más, a quienes estamos llamados a elegir y acompañar a los que consideramos idóneos para los cargos, en el ejercicio de una ciudadanía responsable. A estos les recuerdan que otra forma de hacer política es participando y comprometiéndose con la gestión pública.
“A todos los convocamos en este momento histórico a vivir fuertemente la solidaridad “como virtud moral y actitud social”, aseveraron los prelados correntinos. Recordaron que la solidaridad, entendida en su sentido más hondo, es un modo de hacer historia (FT, 116), responsabilidad primordial para quienes ejercen la función pública.
Hacer historia
Los obispos especificaron qué significa “hacer historia”:
- cuidar la casa común, teniendo en cuenta a las generaciones presentes y futuras;
- elaborar propuestas y políticas públicas mediante la consulta popular;
- respetar y posibilitar el libre acceso de cada ciudadano al uso común de bienes, como enseñara San Pablo VI;
- cuidar y proveer lo mejor para combatir la pobreza;
- hacer frente a las precariedades existentes en los servicios sanitarios y educativos, tomando las decisiones necesarias;
- asumir el cuidado de nuestro pueblo ante el flagelo de la pandemia, con responsabilidad, en esta hora histórica.
Finalmente, los prelados recordaron que al tomar conciencia de esta realidad pandémica, si todos colaboramos para superarla, saldremos más rápido y mejores para continuar construyendo el presente y futuro entre todos, sin excluir a nadie.
“Dios jamás abandona a su pueblo, menos aun cuando transcurre por períodos desconcertantes y muy duros como el actual; al contrario, se compromete y acompaña para convertirlos en una oportunidad para crecer en el amor a Él y al prójimo”, expresaron los obispos de la provincia correntina.
Pidieron a la Virgen de Itatí que toque el corazón de candidatos y electores, para que sepamos aunar esfuerzos y trabajar juntos hacia una provincia inclusiva que crezca en un intercambio federal y saludable con toda la Nación.
