Del 12 al 16 de julio de 2021, el Centro de Investigación y Formación Interdisciplinar para la Protección del Menor (CEPROME) llevará a cabo un curso en línea de formación permanente para obispos latinoamericanos e hispanohablantes sobre “La prevención del abuso sexual de menores”.
- ?️ El PODCAST de VIDA NUEVA: La Iglesia alemana, en cuarentena
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
De acuerdo con el padre Daniel Portillo Trevizo, director del CEPROME, el objetivo principal es la sensibilización, la adquisición de conocimiento y la actualización de los nuevos lineamientos que la Iglesia y las ciencias humanas y jurídicas han generado en la materia.
Además, se compartirán experiencias que se han tenido en Latinoamérica para favorecer el aprendizaje conjunto.
Víctimas y victimarios
De acuerdo con información proporcionada por el padre Daniel Portillo, la formación estará dividida en cinco fases.
La primera fase pretende hacer una hermenéutica de los hechos sucedidos en la Iglesia, y en ese sentido, el experto Amedeo Cencini reflexionará bajo la pregunta: “¿Qué ha cambiado en la Iglesia a partir de los abusos sexuales?”. A fin de ayudar a los participantes a desarrollar una perspectiva de los hechos pasados.
Por su parte, el doctor Hans Zollner, presidente del “Centre for child protection”, provocará la reflexión sobre aquello que al día de hoy no ha cambiado en la Iglesia en todo lo que respecta a los abusos y la prevención.
Y María Inés Franck, integrante del Consejo Pastoral para la Protección de los Menores de la Conferencia Episcopal Argentina, sintetizará la historia latinoamericana de una crisis sin precedentes.
En la segunda jornada se hablará de las víctimas. Comenzará la formación con el testimonio de una de ellas. Posteriormente, Alicia Zanotti, también de la Conferencia Episcopal Argentina, abordará la psicodinámica de las víctimas primarias, mientras que el propio doctor Daniel Portillo abordará el discurso sobre las víctimas secundarias.
Al respecto, el padre Portillo explicó que su participación tiene que ver con el hecho de que no todos los obispos han sido encubridores o abusadores, sino que también algunos de ellos han tenido que enfrentar realidades victimizantes, por ejemplo, el tener que hacerse cargo de un gobierno pastoral que precedentemente había sido negligente o, peor aún, encubridor.
El perfil de los abusadores
La tercera jornada se centrará en los abusadores, particularmente en lo que concierne a su perfil en la Iglesia, el cual será tratado por el obispo auxiliar de Bogotá, Luis Manuel Alí; y los posibles tratamientos de los mismos, que llevará a cabo la doctora Patricia Espinosa, de la Universidad Pontificia de México. Este bloque se cierra con el tema de los Derechos Humanos desde el enfoque de las víctimas y los agresores, con la intervención de Ilva Hoyos.
El cuarto bloque está situado en el enfoque del Derecho Canónico y la actualización del Libro VI del Derecho Canónico, así como la competencia y responsabilidad de la Conferencia Episcopal en el tratamiento de los casos y la necesaria responsabilidad y transparencia.
Para este bloque –explica el padre Portillo– “nos acompañarán el arzobispo Charles Scicluna, de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y el doctor Jordi Bertomeou, de esa misma Congregación. “El ciclo se cierra con Myriam Wyjlens, de la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores, quien hablará sobre el Derecho canónico y la Accountability”.
Por último, se tratará el tema de la comunicación y responsabilidad. Dicho enfoque será abordado por la decana de los periodistas vaticanos, la mexicana Valentina Alazraki y por Felipe Herrera.
Aprovechar la pandemia
Para el sacerdote Daniel Portillo Trevizo, hoy en día el CEPROME sólo se entiende con la mística de desde la comunión y el esfuerzo conjunto por erradicar los abusos, lo que le ha llevado a ser considerado como el esfuerzo más serio que, a nivel de acompañamiento, formación e investigación en América Latina, la Iglesia ha ido consolidando.
“Cada vez son más las conferencias episcopales y congregaciones involucradas, pero, lo que es aún mejor, cada vez son más los laicos comprometidos en la construcción de entornos protectores”, afirmó.
El doctor Portillo se refirió al trabajo de CEPROME durante la pandemia, que dijo: “se propuso el desarrollo de una formación cualificada a través de la plataforma Zoom durante más de un año ininterrumpido con una población de no menos de 200 alumnos en cada uno de sus cursos”.
Se inició también el Máster en prevención con una población de 150 alumnos. Los diplomados que acompañaron la formación durante la pandemia intentaron abordar los discursos más especializados con mayor demanda, como el abuso perpetrado a las religiosas, comunicación y transparencia y, por último, el tratamiento de los abusos de las personas vulnerables.
Para concluir, el doctor Portillo aseveró que CEPROME Latinoamérica a través de su Consejo conformado por 11 personas de diez países diferentes, se ha propuesto la misión de formar y coordinar esfuerzos conjuntos que, desde una visión eclesial, interdisciplinar y sinodal pueda ofrecer una formación cada vez más cualificada impartida por los diversos profesionales que se encuentran en diferentes partes del mundo.
“Asimismo se ha convertido en un espacio de apoyo para escucha de víctimas, acompañamiento de las mismas y de los agresores, supervisión de los casos en distintas conferencias episcopales, nunciaturas y congregaciones religiosas”, concluyó.