La Nunciatura Apostólica, a través de su titular Miroslaw Adamczyk, informó que el papa Francisco prolongó la permanencia en el cargo del obispo de San Isidro, Oscar Ojea, con la fórmula ‘donec aliter provideatur’.
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El próximo 15 de octubre Ojea cumple 75 años, y de acuerdo a lo establecido en los cánones 401 1 del Código de Derecho Canónico, presentó su renuncia ante la Santa Sede.
El Nuncio pidió comunicar a la Iglesia local la decisión del Santo Padre de extender el gobierno pastoral de la diócesis del conurbano bonaerense, hasta que se disponga otra cosa.
Trabajo pastoral
Oscar Ojea fue ordenado sacerdote en noviembre de 1972. Es bachiller en Teología por la Universidad Católica Argentina (UCA).
Fue elegido obispo titular de Suelli y auxiliar de Buenos Aires por el papa Benedicto XVI, el 24 de mayo de 2006. La consagración episcopal fue celebrada por el entonces cardenal Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, en septiembre de ese año.
En el año 2009, en octubre, fue nombrado obispo coadjutor de San Isidro, para acompañar la tarea pastoral de Jorge Casaretto. Finalmente, asumió como tercer obispo de la diócesis de San Isidro el 30 de diciembre de 2011.
En noviembre del año 2017, fue elegido presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, cargo que ocupa hasta la actualidad.