El Colegio Oficial de Docentes ha otorgado su Medalla de Honor a algunas instituciones y personas por su dedicación y entrega a la formación permanente del profesorado –incluido el de Religión–, como son la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, el Bristish Council, el Consejo Escolar, la Delegación Diocesana de Enseñanza de Madrid y el Grupo SM.
- ?️ El Podcast de Vida Nueva: Herejes y profetas de la Liberación
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
El Aula Magna de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid ha acogido el acto en el que han participado autoridades universitarias. Con motivo del 40º aniversario de la Universidad de Otoño que apoya la formación de los docentes, se han alabado el compromiso por la mejora de la educación promovida por el Colegio de Doctores y Licenciados.
La Delegación Episcopal viene colaborando con el Colegio Oficial de Docentes desde hace casi 30 años. Inmaculada Florido, delegada episcopal de enseñanza, recogió oficialmente la Medalla de Honor otorgada por el Colegio Oficial de Docentes por el compromiso de su equipo en favor de la formación de los profesores de Religión.
Profesionalidad para la clase de Religión
La Medalla de Honor del Colegio oficial de Docentes ha sido otorgada a Carlos Esteban por su creatividad y profesionalidad a la hora de diseñar la formación permanente de los profesores de Religión en este marco del colegio profesional de la educación. Responsable de formación permanente del profesorado en la delegación, ha dirigido los seminarios de Religión de la Universidad de Otoño desde hace casi 25 años.
En declaraciones a la revista Religión y Escuela, ha destacado “la importancia de planificar la formación permanente de los profesores Religión en condiciones equiparables a los docentes de otras materias. Es muy importante, que se realice en los mismos ámbitos y en las mismas condiciones que otras asignaturas. Nuestra delegación diocesana trata de hacerlo así desde hace mucho tiempo”, explicó
