“¡Renovemos nuestro entusiasmo por caminar juntos en el camino de Cristo!”. Esta ha sido la invitación que ha hecho el papa Francisco hoy en la audiencia con la delegación ecuménica de Finlandia, que ha llegado a Roma en peregrinación con motivo de la fiesta de san Enrique y coincidiendo con las vísperas de la Semana de oración por la unidad de los cristianos.
- OFERTA: Año nuevo, Vida Nueva: este 2022 suscríbete con una rebaja del 20%
- PODCAST: Yo era ateo, pero ahora creo
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
“El tema de este año está tomado del Evangelio de Mateo: ‘Vimos la estrella en el oriente y venimos a adorarlo’, ha dicho el Papa, quien ha explicado que esta referencia a los Reyes Magos “quienes al final de un largo viaje, encontraron a Jesús y lo adoraron”, puede aplicarse también a los cristianos. “Los Reyes Magos llegaron a la meta porque la buscaron”, ha explicado, “sin embargo, la buscaron porque el Señor, por la señal de la estrella, había salido primero a buscarlos”. Es decir, “encontraron porque buscaron, y buscaron porque ellos mismos habían sido buscados. Es bueno ver la vida así, como un camino de búsqueda que no parte de nosotros mismos, sino de Aquel que primero salió a buscarnos y nos atrae hacia sí con su gracia”, porque “todo nace de la gracia de Dios que nos atrae hacia él”.
Caminar unidos
Asimismo, el Papa ha recordado la necesidad de “viajar juntos”. “Quien es tocado por la gracia de Dios no puede replegarse en sí mismo y vivir sólo para sí mismo“, ha señalado. “La tradición eclesial ha visto a los Reyes Magos como representantes de diversas culturas y pueblos”, por lo que, “también nosotros, especialmente en estos tiempos, estamos llamados a tomar de la mano a nuestros hermanos y hermanas, con su historia concreta, y a caminar juntos”.
Finalmente, Francisco ha recordado que en 2030 se conmemorará el 500 aniversario de la Confesión de Augsburgo. “En un momento en que los cristianos estaban a punto de emprender caminos diferentes, esa Confesión trató de preservar la unidad. Sabemos que no consiguió evitar la división, pero el próximo aniversario puede ser una ocasión fecunda para animarnos y confirmarnos en nuestro camino de comunión, para que seamos más dóciles a la voluntad de Dios, y menos a las estrategias humanas, más dispuestos a preferir a los fines terrenales el camino señalado por el Cielo”, ha afirmado.