La 15 edición de la Conferencia de Lambeth, que ha reunido este mes al episcopado anglicano, llega a su fin después de haber puesto en marcha las ‘Lambeth Calls’, con las cuales se han querido poner de manifiesto aquellas llamadas a la acción presentes en el mundo actual.
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El tema de la sexualidad y el matrimonio ha sido uno de los más tratados estos días. Pero, si bien persisten marcadas divisiones sobre temas de sexualidad humana en toda la comunidad anglicana, que está presente en 165 países, lo cierto es que el tono general ha sido conciliador.
Así, durante su última conferencia, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, subrayó que los cristianos “están llamados a la reconciliación y a ser reconciliadores, aunque a veces la iglesia tose y se tambalea en la oscuridad del mundo “por temor al futuro”.
Representación católica
El sábado, el cardenal Luis Antonio Tagle participó en la Lambeth Conference con un discurso, invitado por el arzobispo de Canterbury. Allí, el cardenal Tagle ofreció sus propias reflexiones sobre el tema de la reunión, ‘La Iglesia de Dios para el mundo de Dios: caminar, escuchar y testificar juntos’, con una charla titulada, “La Iglesia de 1 Pedro para la próxima década”.
La Conferencia de Lambeth se lleva a cabo cada diez años y marca un momento clave para las discusiones sobre la Iglesia, así como los asuntos mundiales y la misión global de la Comunión Anglicana para la próxima década. Para ello, se invita a oradores de todo el mundo. La reunión mundial ha tenido lugar cada década desde 1867.