La situación en Malí –donde no hace tanto fue secuestrada la religiosa colombiana Gloria Cecilia Narváez– no mejora para los cristianos. Una de las últimas noticias que llegan del conflictivo país africano es el secuestro del sacerdote alemán Hans-Joachim Lohre, misionero desde hace 30 años en esta tierra. La hipóstesis del secuestro es la que más relevancia ha cobrado tras encontrar rastros de un forcejeo frente a su coche en Bamako.
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En plena capital
Lohre es sido una figura destacada en el diálogo interreligioso del inestable país en el que operan diferentes grupos extremistas islámicos. Precisamente se apunta hacia estos terroristas como posibles autores del secuestro que ha sido confirmado este martes, 22 de noviembre, la Conferencia Episcopal del país después de que las agencias internacionales informan del que sería el primer secuestro de un europeo occidental en la capital durante la última década.
Según recoge el portal katholisch.de el sacerdote se preparaba para ir a misa el domingo cuando los vecinos se percataron de la presencia de un coche negro sin matrícula frente a su puerta. Cuando ese sospechoso coche desapareció, el cura tampoco estaba ya allí. La policía ha señalado que se está haciendo todo lo posible para encontrar al clérigo.