Autores

Raymundo Portillo

‘Puer natus est’, la antigua antífona de Navidad

Una antífona de adoración que proclama la manifestación gloriosa de Dios con nosotros: la llegada del Emmanuel para nuestra salvación

Lo que dice el Baldaquino, centralidad catequética

El baldaquino como objeto espacial era visible, hiper adornado con ángeles y glorias, destacado de su entorno en altura, y no como un elemento de separación o segregación

La Madonna del Panteón

La icona recién restaurada, es una obra de arte con singular valor histórico, que regresa la mirada a los primeros siglos del cristianismo

La vestidura de la Pascua

La antiquísima liturgia bautismal de la noche de la pascua estaba llena de acciones que introducían al creyente a la nueva vida en Cristo

El Cristo del “trocito de papel” de San Juan de la Cruz

Normalmente las reliquias de los santos son objetos que han estado en contacto con la persona durante su vida y misión en la tierra. De San Juan de la Cruz se conserva una reliquia de un dibujo suyo, famoso en el mundo de las artes

El ‘Anima Christi’ de Marco Frisina en la JMJ

Cuando en el año 2000 se celebró la JMJ, en el marco del gran jubileo, en la explanada de Tor Vergata, varias tonadas marcaron el ritmo de la histórica vigilia de oración, en la que San Juan Pablo II moviendo los brazos se unía al coro y alabanza de los asistentes con la canción 'Jesus Christ you are my life', melodía que se convirtió desde aquel momento en el himno no oficial de las JMJ.

La fraternidad, bloque a bloque en Abu Dabi

“El diálogo entre los creyentes significa encontrarse en el enorme espacio de los valores espirituales, humanos y sociales comunes, e invertirlo en la difusión de las virtudes morales más altas, pedidas por las religiones”, se lee en la declaración de Abu Dabi.

La Basílica de la unidad de los cristianos

La Basílica de San Pablo Extramuros es el referente arquitectónico inmediato en cuanto a ecumenismo y diálogo entre los cristianos. De allí que, las dos expresiones que marcan la actividad pastoral del recinto son la reconciliación y la oración constante por la unidad de los cristianos.
Marko Rupnik

¿Condenar a Rupnik y a su obra?

¿Qué hacer entonces con la obra del artista que ha pecado? La respuesta no es otra que aplicar el viejo adagio que parafraseaba a San Agustín: “Hay que odiar el pecado, pero amar al pecador”.