Finalizó hoy la 192° reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Argentina, presidida por su titular y obispo de San Isidro, Oscar Ojea. que estuvo acompañado por los obispos de la Comisión Ejecutiva: Marcelo Colombo, arzobispo de Mendoza y vicepresidente 1°; Carlos Aspiroz Costa, arzobispo de Bahía Blanca y vicepresidente 2°, y Alberto Bochatey, osa, obispo auxiliar de La Plata y secretario general.
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También estuvieron presentes, los obispos presidentes de la Comisiones Episcopales estatutarias y los representantes de las regiones eclesiásticas. Fueron visitados por el Nuncio Apostólico, Miroslaw Adamczyk, a quien le agradecieron la visita y rezaron juntos por el papa Francisco.
Intercambio pastoral
Durante estas jornadas, los obispos argentinos tuvieron un intercambio sobre la realidad social y pastoral del país. A su vez, analizaron cómo acompañar al pueblo de Dios en temáticas importantes como: educación, vocaciones, pastoral carcelaria y social.
Después de la Asamblea Plenaria de noviembre, presentaron una evaluación metodológica del plenario y cuestiones referidas al Sínodo, con la continuidad de los pasos de cada etapa y los preparativos de la delegación argentina en el encuentro de la fase continental que se realizará en Brasilia, entre el 6 y el 10 de marzo.
Asimismo, se aprobó el nuevo reglamento “ad experimentun” de la Comisión Episcopal de Pastoral Universitaria, por 3 años, y se trabajó en torno al acompañamiento de la Educación Católica en el país.
Al término de la reunión, el Comisión Episcopal de Catequesis, Animación y Pastoral Bíblica, Gabriel Mestre y el obispo Ojea, presentaron el documento aprobado por la Asamblea Plenaria sobre la institución del ministerio laical del catequista en la argentina.
Saludo al papa Francisco
Como es habitual, los obispos reunidos en la Comisión Permanente expresaron su comunión fraterna con el Santo Padre, y aprovecharon la ocasión para saludarlo por el 53° aniversario de ordenación sacerdotal y por su próximo cumpleaños, el día 17.
“Queremos compartirte que, si bien nos sentimos desafiados por este tiempo complejo y hasta violento, nos anima el consuelo que nos da estar sirviendo juntos al Evangelio de Jesús y al Pueblo de Dios”, le señalaron los obispos, y le prometieron su oración.
