Tras la gran ola de entusiasmo por las nuevas tecnologías, digitalización y redes mediáticas, y haber dejado como obsoletos muchos medios formativos clásicos, estamos ahora en una etapa de síntesis para aprovechar lo mejor de cada tiempo. Una de las prácticas que debemos recuperar es el pensamiento manuscrito. Ofrecemos diez razones para tomar apuntes e ideas de forma manuscrita sobre papel. Vuelven los cuadernos.
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- Tomar notas a mano es un 25% más rápido. Contrariamente a las creencias populares de que las herramientas digitales aumentan la eficacia y la concentración, el estudio realizado por expertos de la Universidad de Tokio y publicado en la revista Frontier in Behavioral Neuroscience nos dice que las personas que usan papel completan la tarea de tomar notas un 25% más rápido que las que usan dispositivos digitales.
- La actividad neuronal es mayor y establece una relación más inmediata entre palabra y cuerpo. Quienes escriben a mano tienen mayor actividad cerebral en las áreas asociadas con el lenguaje, la visualización imaginaria y el hipocampo, una zona importante para la memoria. Tanto los cerebros de los adolescentes como los de los adultos son mucho más activos al escribir a mano que cuando lo hacen con el teclado. Según los expertos, “el uso de lápiz y papel le da al cerebro más ‘ganchos’ para alojar sus recuerdos, escribir a mano crea mucha más actividad en las partes sensomotoras del cerebro”. Para los investigadores, muchos sentidos se activan escribiendo, viendo los trazos de las letras en una superficie.
- Escribir a mano relaja el estrés, reduce la ansiedad y ralentiza la hiperactividad.
- La información espacial es más compleja. Anotas más la forma de la estructura del contenido, no transcripciones de palabras. Se hacen dibujos que intensifican el pensamiento visual, se da forma mejor a los esquemas y se seleccionan mejor las palabras, conceptos o procesos significativos.
- Escribir sobre papel es más irreversible y uno selecciona con mayor cuidado lo que escribe o dibuja, existe una preselección cerebral que procesa, sintetiza y elige, lo cual supone una primera interiorización más profunda de los contenidos.
- La escritura aumenta la expresividad permite el pensamiento visual haciendo esquemas, dibujos. Favorece la creatividad.
- Favorece la asociación y el razonamiento lógico. Permite conectar mejor distintas partes de lo que se escribe.
- Favorece la internalización del contenido. Uno expresa con su letra personal los contenidos, haciéndolos más propios.
- Se atiende más a la persona que habla, no media entre ellos una máquina. Favorece la interacción más directa con el profesor y compañeros. Aumenta la concentración porque uno no tiene que estar gestionando la máquina, no existen distracciones de mensajes y notificaciones externas, y reduce la tentación de hacer otro tipo de actividades que no son propias de la asignatura y la clase.
- Fija más los contenidos y activa la memoria. Otra investigación, esta vez realizada por expertos de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU), demuestra que tanto los niños como los adultos aprenden más y recuerdan las cosas de manera más eficaz cuando escriben a mano que cuando lo hacen con un teclado. Cuando se escribe y dibuja sobre papel se lee, piensa y memoriza mejor. A partir de los datos del Informe PISA 2018, se demostró que quienes leen libros en papel doblan sobradamente el rendimiento académico de quienes solo los leen en pantallas.