El seleccionador de fútbol, Vicente del Bosque, está convencido de que “solo he intentado cumplir con ese mínimo de compromiso social que una persona tiene que tener”. Así lo manifestó el laureado entrenador al recoger su galardón en la categoría Ética y Valores, en la gala de entrega de la XXVI edición de los Premios CEU Ángel Herrera, celebrada esta mañana en el Hotel Villamagna de Madrid.
- OFERTA: Año nuevo, Vida Nueva: este 2023 suscríbete a la revista en papel todo el año por solo 99,99 euros
- PODCAST: No callarás: la Iglesia que sí clama contra la violencia machista
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Del Bosque defendió que “no creo que me diferencie mucho de los que estamos aquí, lo único que he tenido es un escaparate de una selección nacional y de una victoria”, en un evento en el que ejerció de anfitrión el presidente de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Alfonso Bullón de Mendoza, y que contó con la asistencia, entre otros, del alcalde de Madrid José Luis Martínez-Almeida y del nuncio Bernardito Auza. Junto a Del Bosque, se reconocieron hasta una decena de personalidades e instituciones de diversos ámbitos de la sociedad y la cultura, desde la solidaridad y la cooperación al desarrollo a la innovación educativa. Durante el evento, Bullón de Mendoza recordó que el CEU cumple ahora 90 años, con el deseo de continuar “con el legado del Ángel Herrera y del jesuita Ángel Ayala”. Por su parte, Martínez-Almeida destacó que “el talento no es todo, sino que es necesario una formación como la que propicia el CEU”.
La voz de los misioneros
En el ámbito eclesial, la periodista María Ángeles Fernández y Obras Misionales Pontificias fueron premiados como Mejor Trabajo Periodístico en Doctrina Social de la Iglesia. “Dios me acompaña en cada momento y mi trabajo me permite conocerle, estar más cerca de él, y propiciar el encuentro con otras personas”, expuso la directora del programa ‘Últimas preguntas’ que dedicó el premio a sus hijas, a sus padres y a sus compañeros de profesión. Por su parte, desde OMP, Paula Rivas y Javier López, compartieron cómo “sintiéndonos muy pequeñitos, somos comunicadores de lo que hacemos los misioneros, que nos lo ponen muy fácil porque son la mejor materia prima”.
En la categoría Difusión de la Cultura Católica, la Fundación San Pablo CEU premiaron a la Jornada Mundial de la Juventud, la iniciativa promovida por el cardenal argentino Eduardo Pironio como presidente del Pontificio Consejo de los Laicos y que Juan Pablo II convirtió en el gran evento católico de evangelización para los jóvenes que este verano acogerá Lisboa.
“La JMJ principalmente es un encuentro de los jóvenes con Jesucristo para promover una experiencia vocacional y ofrecer a los jóvenes una mirada al horizonte con esperanza”, expuso Daniele Bruno, presidente de la Fundación Juan Pablo II para la Juventud, que recogió el premio en nombre del prefecto para los laicos, Kevin Farrell.
Educar para acoger
Entre los galardonados, también se encontraba la periodista del diario La Razón, Rocío Ruiz, en la categoría de ‘Mejor trabajo periodístico en materia educativa’, por un reportaje sobre un centro educativo que acoge los fines de semana a un centenar de niños ucranianos refugiados.
La periodista de La Razón, Rocío Ruiz
“La escuela no es solo un lugar de transmisión del conocimiento, sino un espacio de acogida, encuentro, donde construir la Ucrania del futuro”, expuso la jefa de sección de Madrid del diario, que no dudó en denunciar el ‘olvido’ hacia esta guerra europea: “No se aprecia esa sensación de urgencia con el conflicto y eso afecta a la ayuda”. A la par, Ruiz agradeció el premio, en tanto que supone “un impulso que necesitamos los periodistas para contribuir a ampliar las formas de pensar en la ciudadanía”.
