Una nueva denuncia ha llegado al caso Rupnik. Y es que, tal como revela una investigación del diario italiano Domani, una ex religiosa eslovena ha acusado al jesuita de abuso sexual y psicológico. Se convierte, de esta manera, en la cuarta víctima en hacer público su relato.
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Domani publicaba ayer, una entrevista con la mujer, en la que asegura que Rupnik la presionó para mantener relaciones sexuales. En aquel momento, tal como revela la mujer en la entrevista, tenía 22 años. Sin embargo, Rupnik la habría convencido mucho antes, siendo una adolescente, para unirse a la comunidad religiosa que él mismo dirigía.
Así, la mujer relata al periódico cómo el jesuita ejerció sobre ella “control psicológico” para forzarla a mantener relaciones sexuales. Fue cuando ella se negó a participar en un trío cuando el jesuita habría comenzado a desplegar una “agresión psicológica, emocional y espiritual cruel” con el objetivo de “destruirla”.
Cronología de los hechos
Johan Verschueren, consejero general y delegado para las Casas y Obras Interprovinciales de la Compañía de Jesús, explicaba el pasado mes de diciembre la cronología de los hechos.
Señalaba, de esta manera, que en el caso Rupnik ha habido dos investigaciones: una por los propios abusos y otra por haber absuelto a una de las víctimas de haber “pecado contra el sexto mandamiento”.
Verschueren explicaba que, en junio de 2021, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe se puso en contacto con la Curia General de la Compañía de Jesús para tratar el tema de las denuncias por abusos “sobre el padre Rupnik y algunos miembros de la comunidad de Loyola”. Un mes más tarde, en julio, “el padre general establecía una investigación preliminar dirigida por una persona externa a la Compañía”. En aquel momento, el mismo Verschueren impone las “restricciones” al ministerio de Rupnik.
En enero de 2022 la investigación concluye “que había un caso que responder”, y estos resultados son enviados a Doctrina de la Fe “con una recomendación de proceso penal”. Sin embargo, en octubre de este año el Vaticano responde que los hechos denunciados han prescrito, así que “ningún juicio puede continuar” aunque “continúan las restricciones al ministerio del padre Rupnik”.
Sin embargo, sería la otra investigación, la realizada por la “absolución de un cómplice en un pecado contra el 6º mandamiento”, es decir, por parte de Rupnik a una de las víctimas, la que le valdría la excomunión durante un mes de Doctrina de la Fe.
Las primeras notificaciones sobre este hecho se conocieron, asegura Verschueren, en octubre de 2018, momento en el que inició la investigación. En mayo de 2019 “la investigación considera que las acusaciones son creíbles”, lo cual se notifica a Doctrina de la Fe, y en junio del mismo año Verschueren “impone las restricciones” a Rupnik.
En julio de 2019, el Vaticano “pide a la Compañía que establezca un proceso administrativo penal”, y, en enero de 2020, los jueces (todos externos a la Compañía de Jesús) “dicen por unanimidad que efectivamente hubo absolución de un cómplice”. Finalmente, en mayo de 2020, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe ratifica los hechos y “declara que el padre Rupnik está en estado de excomunión latae sententia”, aunque esta se levanta por un decreto del mismo dicasterio “un mes más tarde”.