La justicia de Chipre ha declarado culpable de abusar sexualmente de una menor al obispo ortodoxo Crisóstomo de Kition, sentenciándolo a un año de prisión condicional. Se convierte, así, tal como recoge Le Figaro, en la primera condena a un alto rango de la Iglesia ortodoxa en el país.
- PODCAST: El voto católico en las elecciones
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Los hechos tuvieron lugar en 1981, cuando Crisóstomos de Kition, que en ese momento tenía 42 años, “escogió a su víctima, una niña de 16 años que buscaba ayuda económica y le pidió que saliera sola en una cita”, dijo la jueza Evi Efthymiou.
“En lugar de ayudarla, optó por agredirla”, añadió, explicando que “la única pena adecuada es la prisión, pero la pena suspendida está justificada” tanto legalmente como por la avanzada edad del ex obispo, de 84 años.
Expulsarlo del Santo Sínodo
La víctima presentó su denuncia en 2021, 40 años después de lo ocurrido. Desde entonces, otras seis mujeres han presentado denuncias contra el hombre que, después de servir como obispo de Larnaca, ocupó otros puestos de alto rango en la Iglesia ortodoxa chipriota.
Ahora, el Santo Sínodo de la Iglesia ortodoxa se reunirá el próximo 13 de junio para decidir si lo expulsa o no del mismo.