El arzobispo mayor de Kiev-Galitzia y toda la Rus y Primado de la Iglesia greco-católica ucraniana, Sviatoslav Shevchuk, se ha desmarcado con unas declaraciones muy críticas sobre el papel del papa Francisco y la diplomacia vaticana durante la invasión de Ucrania. “Nos gustaría que el Papa Francisco se pusiera inequívocamente del lado de Ucrania, también a nivel diplomático y político, condenando a los agresores. Nos gustaría que dijera claramente quién es el agresor y quién es la víctima”, ha señalado el prelado de 53 años en una entrevista concedida a la agencia de noticias ucraniana Glavcom recogida por Open.
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Pasos que fracasan
Para el arzobispo “el Vaticano no tiene herramientas para actuar a nivel político, solo puede usar la diplomacia, pero hasta ahora no ha funcionado”. En este sentido denuncia las ambigüedades del papa Francisco respecto a la posición del Vaticano en esta invasión al no condenar enérgicamente el papel de Rusia. “Basándome en los gestos del Papa, en los movimientos que Ucrania percibe del Vaticano, puedo decir que hoy todo lo que el Papa ha intentado hacer por Ucrania desde el comienzo de la invasión a gran escala ha fracasado. ¿Por qué? Aún no lo hemos entendido del todo. Quizá lo descubramos con el tiempo. ¿Ha girado la cabeza el Papa para no molestar a nadie? No. Se tomaron muchas medidas diferentes, pero desgraciadamente ninguna de ellas condujo al resultado deseado”, señaló.
Shevchuk relata que“a finales de 2021, era diciembre, cuando ya empezaban a soplar vientos de un gravísimo deterioro de la situación de seguridad para Ucrania. Le pedí personalmente al papa Francisco que hiciera todo lo posible para evitar una guerra. Le pedí que impidiera una invasión a gran escala. Ha habido una serie de gestiones diplomáticas, cartas personales del Papa al presidente estadounidense Biden y a Vladimir Putin. Pedí gestos similares para nuestra situación. Pero, cuando empieza la guerra y las armas hablan, las palabras no sirven”, sentencia enumerando gestos como las llamadas del Papa al patriarca Kirill de Moscú.
Gestos limitados
Para el arzobispo, “el mensaje principal que el Papa Francisco quiere llevar a Ucrania probablemente todavía se está elaborando”, ya que el pontífice “realmente quiere hacer todo lo posible para detener esta guerra. Vemos hoy que la guerra, todos los crímenes cometidos por Rusia en Ucrania, hacen de nuestro país uno de los mayores desafíos de este pontificado, uno de los mayores desafíos de la misión del Papa Francisco en el mundo moderno”, apuntó.
“Algún tiempo después del comienzo de la guerra, el Papa dejó claro en varias entrevistas quién era el agresor y quién la víctima. Esto se confirma no por declaraciones directas, sino por los mecanismos humanitarios que el Papa utiliza para salvar vidas en Ucrania. Por ejemplo, desde el comienzo de la guerra, por mediación del Santo Padre, se ha intentado salvar la vida de niños de varios orfanatos que acabaron en territorio ocupado”, alabó Shevchuk, quien agradeció los esfuerzos del Papa por Mariupol o la acción humanitaria.
